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Los tres trabajadores de Airbus en Puerto Real acusados de un delito agravado de daños, al ocasionar “desperfectos” en la vía pública e incluso “un incendio” durante los disturbios que se produjeron en abril de 2021 contra el cierre de esta planta han alcanzado un acuerdo que les condena a un año y medio de cárcel, de modo que evitan entrar en prisión, y una multa de 1.000 euros, más los costes de los daños ocasionados, frente a los tres años y medio de privación de libertad, una multa de 6.500 euros y más 53.000 euros de indemnización que solicitaba la Fiscalía.
La vista, que ha tenido lugar en el Juzgado de lo Penal número 1 de Cádiz justo en el inicio de la huelga del metal, se ha celebrado después de que los trabajadores afectados por el nuevo convenio del sector mostraran su respaldo en una concentración convocada a primera hora de la mañana.
“No cabe en cabeza que después de una manifestación donde estuvimos más de 800 personas para defender nuestros puestos de trabajo en la factoría, que al final ha cerrado, no creemos que estos tres compañeros sean víctimas de la ley mordaza y tengan las pretensiones de que puedan pisar la cárcel”, ha lamentado Juan Antonio Guerrero, secretario general de CGT Andalucía, Ceuta y Melilla y miembro del comité de empresa de Airbus Puerto Real. “Se les quiera coger como cabezas de turco por una movilización en la que estuvimos todos y todas”, ha agregado, por su parte, José Ignacio García, portavoz de Adelante Andalucía.
