En rueda de prensa, el presidente de la FOE, Antonio Ponce, ha vaticinado que la implantación de esta medida que pretende el Gobierno portugués supondrá llevar a la Eurorregión Andalucía-Algarve-Alentejo "20 años atrás".
La medida tampoco es bien vista por los propios empresarios portugueses, ya que, según ha explicado Ponce, la Asociación Empresarial del Algarve ya ha mantenido reuniones con el Gobierno luso para que dé marcha atrás en su intención de aplicar esa medida que, como se ha visto con el peaje Vigo-Lisboa, "no tiene más eficacia que su fin recaudatorio".
Pese a esto, y a que desde España también se están haciendo gestiones para que la medida quede sin efecto, el máximo representante de la patronal onubense considera que "no va a ser posible que lo quiten".
"Lo único que nos queda es que se colapse El Algarve cuando la gente vaya por la carretera general, la N-125, en lugar de por la autopista", una vía que, según han advertido ya desde distintos frentes, no cuenta con las condiciones de seguridad para soportar el aumento de volumen de tráfico previsto cuando entre en funcionamiento el peaje, ha precisado.
