El abogado de la acusación particular, Pedro Pérez, explicó que la mujer y los hijos del hombre supieron de los hechos cuando se encontraban en la sala de la Audiencia provincial a la que habían sido convocados para participar en el juicio.
El acusado, A.G.C., que padece una dolencia cardiaca por la que tuvo que se ingresado en el hospital hace unos meses, se encuentra en estado “muy grave” como consecuencia de la ingesta de lejía. Según Pérez, el juzgado de lo penal número tres de Jerez ha enviado a un médico forense para evaluar su estado.
El juicio ha sido aplazado hasta el 10 de marzo, aunque todo dependerá de cómo evolucione el acusado. Pedro Pérez entiende que este último episodio no debe afectar al desarrollo del juicio ya que el juzgado tiene en su poder “todas las pruebas psicológicas” del presunto agresor.
La acusación particular pide veinte años de prisión para A.G.C. por delitos de coacción, amenazas y maltrato habitual.
Los hechos ocurrieron en julio del pasado año.