El Parlamento de Chipre ha aplazado a este lunes la sesión en la que se debe ratificar el gravamen sobre los depósitos bancarios a la población, como parte del acuerdo de rescate europeo.
La quita debe legitimarse ante el Parlamento, pero el proceso cuenta con el rechazo categórico de la oposición y dudas entre los aliados del Gobierno del presidente Nicos Anastasiades.
Por ello, el presidente ha el Ministerio de Economía ha anunciado el aplazamiento de la comparecencia prevista para hoy y, por consiguiente, la cámara ha decidido anular la sesión para facilitar el acuerdo, según informaron a Reuters fuentes políticas, y reunirse mañana, a las 9.30 horas (8.30, hora peninsular española).
La propuesta de ley quedaría aprobada con una mayoría simple, pero el partido de Anastasiades, la Unión Demócrata, solo tiene 20 de 56 escaños. Los comunistas del Partido Progresista de los Trabajadores (AKEL), contrarios al acuerdo, tienen 19 y se han negado a aceptar las propuestas de conciliación.
El próximo martes, los bancos chipriotas comenzarán la expropiación estipulada de los depósitos bancarios. Los depositarios que tengan más de 100.000 euros pagarán un equivalente al 9,99% de sus ahorros; quienes no alcancen esa cantidad abonarán el 6,75%.