La Asociación de Hosteleros y Restauradores de Cádiz (Horeca) y la Unión de Consumidores de Cádiz han solicitado un “control exhaustivo” en las calles para evitar que se monten barras ilegales.
Según exponen, estas barras “constituyen una competencia desleal hacia los profesionales del sector de la hostelería”, pero además “son un peligro para la salud al no existir un riguroso control higiénico-sanitario de los productos alimenticios”, lo que conlleva un “auténtico peligro al consumidor”.
Ambas entidades exigen un mayor control para evitar estos problemas y, a la vez, solicitan a los ciudadanos que “no consuman en estas barras por motivos de salud y por la falta de garantías al ser actividades ilegales y, por tanto, carentes de hojas de reclamaciones, listas de precio, etcétera”.
Por su parte, la Federación de Consumidores en Acción (Facua) achacó la proliferación de mostradores ilegales a la “falta de control municipal”, que además hace que los establecimientos “legalmente establecidos no cumplan la normativa vigente”.
Desde la entidad recordaron que los hosteleros tienen “total libertad” para establecer sus precios, si bien “tiene la obligación de disponer de una lista de precios ubicada en un lugar visible”. Además, informan que deben disponer de hojas de reclamaciones y recomiendan que, si se niegan a entregarla, el consumidor debe requerir la presencia de la Policía Local.

Pocas quejas sobre reventa
Facua Cádiz mostró su satisfacción por el descenso de las quejas y consultas relacionadas con la venta de entradas, lo que se debe al “éxito” de la personalización de las entradas. Se trata de una medida que la entidad ha reivindicado durante años con el fin de evitar la reventa, que “perjudica gravemente a quienes no podrían abonar las cifras astronómicas exigidas”.
La mayoría de las quejas recibidas sobre el COAC 2009 se refieren a la falta de información sobre los días de puesta a la venta en taquilla e internet.