El tiempo en: Cádiz
Sábado 18/05/2024  

Videojuegos

Análisis Bioshock The Collection

La saga de 2K Games vuelve con remasterizaciones de sus tres episodios en PS4 y Xbox One, y tres de las mejores historias de la pasada generación.

Suele suceder que cuando sale a colación el tema de los videojuegos la relación más directa que se aplica es la de juguete, como si el ocio digital no pudiera contar historia profundas, sesudas y con influencias de la misma realidad. Para esas cuestiones queda otros formatos más maduros o con solera como el cine o la literatura. Por suerte, esta creencia, como muchas otras, vive más alineada con los estereotipos que con la realidad, y la saga de juegos Bioshock lo demuestra.

Bajo una capa de juegos de disparos en primera persona se esconde un mensaje mucho más profundo obra de la desarrolladora Irrational, la editora 2K Games y el creativo Ken Levine, uno de los diseñadores de videojuegos más reputado de la última década. Lo que propone, en esencia, es un universo en el que pegar unos tiros, pero si miras más allá de esta primera encuentras un complejo universo donde dos sociedades virtuales se enfrentan por razones políticas.

Bioshock: The Collection recrea los tres juegos que se lanzaron en la anterior generación de consolas (Bioshock, Bioshock 2 y Bioshock Infinite) adaptándolos con palpables mejoras para las actuales PS4 y Xbox One. Tres juegos al precio de uno, tres experiencias que todo jugador que quiera ver un poco más allá de los clichés de la industria sabrá disfrutar. Porque Bioshock, además de disparar a enemigos, dispara a tu cabeza para que reflexiones.

Dos mundos en tres juegos; la ciudad sumergida de Rapture,  paraíso donde la sociedad vive en base a la ideología de Andrew Ryan, y la urbe voladora de Columbia, territorio liberado de EE UU, cada uno con sus calles, sus habitantes, su ideología y sus trifulcas. Son precisamente estos dos elementos los que desatan el caos y dan pie a tramas en las que el individualismo, el racismo, las clases sociales y el egoísmo cobran fuerza para dar forma a guiones excepcionales.

Porque Bioshock: The Collection es un juego de disparos, pero también una genial experiencia para conocer cómo se pueden crear y destruir sociedades virtuales en unas horas. Una oportunidad única para recordar tres videojuegos imprescindibles. 

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN