De María no entiende el porqué de estas nuevas restricciones previstas, ya que “el que va a un bar donde se fuma apenas está unos minutos y, además, sabe a dónde va”. Recuerda que al principio de implantarse la Ley, muchos bares eligieron eliminar el tabaco y “a la semana tuvieron que cambiar porque no entraba nadie”.
Cree que la reforma de la Ley restará clientela a los bares, ya que “ni siquiera podrán tomarse el respiro de esos 15 minutos con un café y un cigarrillo”.
Tampoco entiende para qué servirán las obras en los restaurantes de más de 100 metros metros cuadrados y que en su día hicieron una fuerte inversión para adaptarse a la norma. “Si los restaurantes tienen su zona de fumadores, donde no se molesta nadie, ¿por qué ahora hay que prohibirlo?”, se pregunta De María.
De “hipócrita y demagógica” tilda el presidente de la patronal hostelera esta nueva medida que prevé Sanidad, ya que “utilizan el término ‘lugares públicos’ cuando quieren decir restaurantes y bares, que son los únicos sitios que quedan” donde se permite el consumo del tabaco.