Una vez realizado este gesto simbólico, quisieron que la ciudadanía jerezana en general conociera la situación, por lo que en fila, en orden y permaneciendo encadenados, se dirigieron hacia las puertas del Ayuntamiento donde realizaron una sentada pacífica.
Uno de los alumnos afectados, Rafael Palma, explicaba ayer a este medio que un buen ejemplo “de las lagunas del sistema es la nueva ley publicada en el BOJA el día 1 de octubre, que perjudica a todo el alumnado de segundo de Bachillerato que, por cualquier motivo, decidió repetir curso este año”. Añadió que si esta ley hubiera llegado en junio “nos hubiésemos mentalizado para el nuevo sistema, la nueva Selectividad” pero ahora, en mitad de octubre, “la ley dice que no se puede repetir curso y que sólo se cursarán las materias pendientes del año anterior, obligando a realizar las mismas, invalidando así la matriculación ya realizada”.
Este estudiante criticó que, además, “¿quién me pagará los 100 euros que me he gastado para una asignatura que ahora dicen que no voy a cursar?”. Por último, quiso matizar que el problema es que “quienes hacen las leyes desconocen el funcionamiento de las aulas”.