El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha pedido este martes a la Junta de Andalucía que sea "valiente" y ponga sobre la mesa un aumento de las restricciones en la comunidad para luchar contra la pandemia del coronavirus, si cree que son necesarias.
Así se ha pronunciado Fernández, en declaraciones a Canal Sur TV, recogidas por Europa Press, donde ha recalcado que las comunidades autónomas, tras la caída del estado de alarma, tienen instrumentos y herramientas para luchar contra la pandemia del coronavirus y además tienen la posibilidad de pedir al Ejecutivo nacional un estado de alarma para su territorio.
Ha recalcado que las comunidades tienen la posibilidad de adoptar medidas desde su ámbito competencial, y cuentan con herramientas que les permiten limitar, cuando se considere oportuno, derechos fundamentales, con todas las garantías que se recogen en la Constitución.
Ha lamentado que el Gobierno andaluz esté permanentemente acusando al Ejecutivo nacional de "todo lo negativo", mientras que todo lo positivo se "lo atribuye". "No son momentos de estar recriminando, sino de colaborar y de remar todos en la misma dirección", según ha apuntado el delegado del Gobierno.
A su juicio, si la Junta entiende que hay que articular alguna medida para luchar contra la pandemia, que sea "valiente", lo diga y tome las decisiones y ha puesto como ejemplo las decisiones que se han adoptado en la Comunidad Valencia, donde hay decretado un toque de queda, con el aval de los tribunales.
"Hay que ser valiente, porque que la salud está por encima de la política", según ha recalcado el delegado del Gobierno, quien ha señalado que una administración no debería tener "miedo" a que la gente le pueda "echar en cara que han adoptado medidas restrictivas".
Fernández ha insistido en que la Junta tendrá que adoptar las decisiones que considere oportunas, en el seno del comité de expertos, en función de varios parámetros.
En cuanto a las aglomeraciones de jóvenes en calles que se produjeron tras decaer el estado de alarma, ha indicado que, sin duda, son preocupantes y ha pedido que cesen esas celebraciones porque el virus sigue estando ahí, a pesar de que la incidencia vaya disminuyendo.
"Es una irresponsabilidad y tiene mucho que ver con la actitud individual de cada uno", según ha dicho el delegado, quien ha garantizado que se va a reforzar la presencia policial para evitar que esas concentraciones de jóvenes se vuelvan a producir.