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La morosidad en las comunidades de vecinos se duplica en un año

A lo largo de 2009, se ha duplicado la morosidad en las comunidades de vecinos de la provincia, de tal manera que hay importantes deudas en la mitad de los más de 12.000 inmuebles gestionados por el Colegio Oficial de Administradores de Fincas de Huelvaa

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  • La morosidad en las comunidades de vecinos afecta al funcionamiento de las fincas.
La crisis llega a todas partes y se está colando por la escalera. A lo largo de 2009, se ha duplicado la morosidad en las comunidades de vecinos de la provincia, de tal manera que hay importantes deudas en la mitad de los más de 12.000 inmuebles gestionados por el Colegio Oficial de Administradores de Fincas de Huelva.
El presidente de esta entidad, David Toscano, indica que además de aumentar la morosidad, “se ha diversificado el perfil del moroso, ya que el que lo era antes, lo sigue siendo ahora, pero en estos meses de crisis hay personas que antes cumplían con los pagos y, por pérdida del empleo u otros problemas, ahora no puede hacer frente a sus obligaciones en la comunidad de vecinos”.
El mapa de morosidad en las comunidades de vecinos se ha llenado de números rojos, pero según el presidente del Colegio Oficial de Administradores de Fincas, “paradójicamente, hay más deudas en las zonas de mayor poder adquisitivo, que en las zonas de recursos medios y bajos, donde se suele intentar por todos los medios cumplir con los pagos”, quizás porque es más difícil afrontar más tarde grandes cantidades.
Una vez agotada la negociación interna y de conciliación con los morosos, según explica Toscano, la única vía a la que se puede recurrir es la judicial, a través de procedimientos de reclamación de cantidad en los juzgados civiles, por lo que “se ha duplicado también el número de procesos, se está produciendo una sobrecarga que provoca que las reclamaciones tarden unos seis meses en solventarse”, y en algunos casos quedan en un callejón sin salida “porque deben notificarse de forma personal y si el vecino no está, la denuncia vuelve al juzgado y puede acabar por archivarse”, aunque en la mayoría de los casos “se salda la deuda antes de llegar al embargo”.
Con esta escalada de la morosidad, el presidente del Colegio de Administradores de Fincas alerta de que “se está llegando a paralizar la actividad en algunas comunidades de vecinos, ya que los morosos no pueden votar y en ocasiones no hay quórum para tomar decisiones y hacer las mejoras necesarias”.

Riesgo de paralización de la actividad en las comunidades de vecinos
El presidente del Colegio de Administradores de Fincas de Huelva destaca que el aumento de la morosidad en las comunidades de vecinos implica un incremento de las deudas a terceros, de tal manera que hay comunidades en las que en las que “no se han podido terminar obras o no se pueden hacer las revisiones y mejoras necesarias para el buen funcionamiento de las fincas, incluso hasta llegar a los cortes de luz y agua”. Así, el Colegio aboga por una reforma de la normativa de procedimientos monitorios -reclamación de cantidades a morosos en comunidades- “para que haya más flexibilidad en la protección de datos y se pueda usar el tablón de anuncios y agilizar los procedimientos”.

Necesidad de una corte de arbitraje
El Colegio Oficial de Administradores de Fincas de Huelva lleva tiempo trabajando para intentar constituir a lo largo del próximo año una corte de arbitraje, con el objetivo de que los conflictos que se produzcan en las comunidades de vecinos puedan solucionarse a través de este organismo de mediación sin tener que llegar a iniciar procedimientos judiciales, mucho más lentos y costosos.

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