A estas declaraciones realizadas por el Delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en la provincia de Cádiz, Gabriel Almagro, a la cadena SER y que se citan textualmente, se ha agarrado el alcalde de San Fernando para denunciar lo que "son las verdaderas intenciones e intereses que tiene el PSOE local de San Fernando, con el señor López Gil a la cabeza", en la puesta en valor de los terrenos de los Polvorines de Fadricas. Esa intención no era otra que la construcción “del orden de las 2.700 a 3.000 viviendas”, según palabras del delegado provincial en cuestión, aunque el alcalde las amplía al mismísimo PSOE en la Junta de Andalucía.
El alcalde y primer secretario del PA en San Fernando, Manuel María de Bernardo, ha recordado que desde 2003, año en el que el Ayuntamiento anunció que iba a realizar una reserva del suelo, "nos venimos encontrando con la continúa oposición deGil a que estos terrenos olvidados sean desarrollados por el Gobierno Municipal ya que prefieren que sea la Junta de Andalucía la encargada de poner en valor ese suelo".
De Bernardo comenta que “cuando el Partido Andalucista tomó la decisión de reservar el suelo teníamos claro cuál era el objetivo de Fadricas, que no es otro que apostar por el desarrollo futuro de la ciudad a través de la construcción de nuevos espacios hoteleros, ampliación de las zonas de ocio y deporte con las que cuenta la ciudad, creación de un puerto deportivo una gran zona verdee y la construcción de viviendas de VPO destinadas a los jóvenes. En ningún caso era hacer de Fadricas una zona invadida por un gran mazacote de ladrillos, como sí pretende el PSOE isleño y ahora ha quedado desvelado claramente”.
El alcalde conjetura con que esas declaraciones reconocen que "existen unos intereses de hacerse con el suelo, y le recuerda a las reuniones organizadas por López Gil y la Junta de Andalucía, "a espaldas de Ayuntamiento isleño", donde pedían que el Consistorio "se olvidara del desarrollo del suelo de los Polvorines y que fuera la propia Junta de Andalucía la encargada de poner en valor el suelo de los Polvorines".
"Lo que hay detrás de esas reuniones es la negociación encubierta de responsables políticos de Defensa y la Junta de Andalucía para apartar al Ayuntamiento del desarrollo de estos terrenos. En definitiva, el proyecto del PSOE consistiría en crear un barrio donde el protagonista es el ladrillo, fomentando así que San Fernando sea una ciudad dormitorio sin ningún tipo de atractivo".
De Bernardo aseguraba en la rueda de prensa que “las palabras del Delegado de la Junta de Andalucía dejan bien claro cuál es el objetivo de López Gil y de su partido político para el futuro de los Polvorines que rompe con las esperanzas de desarrollo de la ciudad. Con estas declaraciones no hay duda de cuál era la verdadera estrategia de López Gil con Fadricas, enmarcada dentro de una constante campaña de desprestigio que pasa por mentir sobre los impuestos de la ciudad, diciendo que son los más altos, siendo mentira; jugar con las ilusiones de miles de parados; criminalizando la normalidad de la existencia de facturas sin consignación, o mintiendo también sobre la gestión presupuestaria municipal que ha tenido un porcentaje ínfimo de reparos. Todo ello ha quedado demostrado por el Gobierno municipal pero López Giil ha seguido insistiendo en su estrategia movido por la ambición de poder aunque para ello tenga que recurrir una y otra vez al engaño y la mentira”.
Esta "confesión" de Almagro es "otro claro ejemplo del doble lenguaje que utiliza el PSOE isleño. Fue el López Gil quien mintió a los ciudadanos difundiendo que el Ayuntamiento sólo quería construir viviendas en Fadricas y que por eso se oponía al proyecto. Después de seis años entendemos cuáles eran los verdaderos motivos para bloquear el desarrollo de esta zona de la ciudad y es que quieren que los beneficios del terreno sean para la Junta en vez de revertir en los ciudadanos isleños. “El portavoz de los socialistas utiliza la doble moral a la vez que se empeña en transformar la realidad de los hechos. Queda clara, por tanto, cuál es la intención del PSOE que consiste en dejar fuera de lugar el proceder del Partido Andalucista, del Gobierno Municipal y el mío propio como alcalde. El único objetivo del Sr. Gil era sacar al Ayuntamiento de la escena para que, apoyado de la Junta de Andalucía, pudiera llevar a cabo su proyecto de ciudad dormitorio”, comenta De Bernardo.
