Un grupo de vecinos de la barriada rural de Las Abiertas ha alzado de nuevo la voz en contra del pago del impuesto por depuración de aguas residuales, que a su vez se enmarca en la factura del agua. Su protesta se fundamenta en que a día de hoy siguen sin depurar las aguas de la barriada a pesar de pagar el canon autonómico. Y, lo peor, es que los vecinos calculan que vierten 25.000 litros de aguas residuales con el correspondiente daño al medio ambiente.
El 18 de abril de 2017 se tramitó la queja ante el Ayuntamiento con la aportación de 51 firmas, “las cuales se perdieron”, según el vecino José María Rojas. Posteriormente, con fecha de 17 de mayo de 2017, se hizo idéntica reclamación sin que hasta ahora hayan recibido respuesta alguna del Ayuntamiento, afectando sus quejas a unas 300 personas vecinas de la barriada. “Estas personas están pagando unos impuestos sin saber lo que están pagando, los cuales son abusivos”, manifiestan.
Además, los vecinos denuncian que, a pesar de pagar sus impuestos municipales, sufren la falta de acerados y bordillos en las calles. “Pedimos que se nos retiren todos los impuestos de los servicios que no tenemos desde hace quince años”.