C.D. Guadalcacín 1
Arcos C.F. 2
Guadalcacín: Lebrón; Gómez (Alberto, 57’), Pulido, Ayala, Chato; Luis Castillo, Parada (Rosales, 72’); David Piñero (Benítez, 57’), Juanjo, Chiqui; Fran Jiménez.
Arcos: Isi Jareño; Álvaro Ramírez, Nico Canavesio, Benítez, Ocaña; Bugatto, Maqui; Caballero, Cuenca (José Antonio, 69’), Legupín (Álvaro González, 80’); Borja (Molina, 90).
Goles:
0-1 m. 16: Cuenca
1-1 m. 50: David Piñero
1-2 m. 77: Borja
Árbitro: Juan Andrés Verdugo Dorado (Sevilla). Amonestó a Lebrón, Juanjo y Chato y expulsó al entrenador Javi Rivas, por los locales; y por el Arcos, a Álvaro Ramírez y Bugatto, expulsando por doble amarilla a Nico Canavesio en el 90+4.
Incidencias: Quinta jornada. Estadio municipal Antonio Fernández Marchán de Guadalcacín. Unos 500 espectadores.
El conjunto de Pepe Bermúdez cambió el curso de las recientes derrotas ante la Lebrijana y Xerez DFC y volvió a recuperar los números verdes al conseguir su segunda victoria a domicilio de la temporada -la primera fue en Ceuta- y la tercera del campeonato, lo que le deja en una óptima séptima plaza en la tabla de clasificación, a un punto de Xerez DFC, Cádiz B, Ceuta y Betis Dpvo. y a dos del segundo clasificado, el Córdoba B. Del primero, el Algeciras, su próximo rival el día de San Miguel, patrón de Arcos, y en pleno fragor de la feria, le separan cuatro puntos. Por cierto, los albirrojos llegan al Barbadillo después de tropezar en El Mirador tras dejarse igualar un 2-0 a favor, para más escozor, con gol del exalgecirista Pablo Ganet, hoy en las filas del San Roque de Lepe. Pero eso nos pilla un poco lejos y lo que más nos interesa es el rendimiento de la edición 2.0 del ‘Arcosbaby’ de Bermúdez en un campo que tradicionalmente no se le ha dado bien ya que no vencía ahí desde la campaña 2014-15.
El Arcos se sabía la lección al dedillo. Nada de complicarse la vida atrás queriendo emular a Beckenbauer y ¡aire! a los balones que llegasen a las inmediaciones de Jareño. Las trampas del ajado césped artificial había que evitarlas intentando no conducir el balón más de lo debido en una superficie de lo más traicionera. A todo eso había que sumar el calor asfixiante que hacía. No se trataba de hacer un fútbol exquisito sino de adaptarse lo mejor posible a las circunstancias y a los factores extrafutbolísticos y eso el Arcos lo hizo mejor que su rival. Además, tuvo ese puntito de suerte que siempre se necesita para salir de airoso de estos lances tan fatigosos ya que en los diez primeros minutos los locales gozaron de varias llegadas claras a cargo de Ayala y Juanjo y en un balón rebotado en Chiqui en un mal despeje de Jareño saliendo del área que pudo acabar en la portería visitante si la diosa Fortuna se hubiera vuelto su espalda.
Pasados esos primeros instantes de aclimatación, un gran servicio de Caballero en el minuto 16 lo aprovechó Cuenca para hacer el primero. El Arcos se sintió un poco más seguro y de ahí hasta el fin de la primera parte solo existió un equipo, el de color blanco, y tanto Legupín como Cuenca, Maqui y de nuevo Cuenca a pase de un gran Bugatto, pudieron ampliar la diferencia. Nada más reanudarse el choque, en el min. 50, David Piñero empataba trayendo el desasosiego. La reacción arcense no tardó y otra vez Bugatto y Legupín avisaron con sus disparos. Pero fue Borja de cabeza a pase de Caballero, en un córner cedido por el arcense Rosales, el que marcó el segundo dando al Arcos la tercera victoria en cinco jornadas.
“Un diez a los míos por el calor”
“Ha sido un partido típico de los que se juegan en Guadalcacín, con muchas segundas jugadas, balón parado, indecisiones, botes extraños, etc. Nosotros habíamos trabajado toda la semana para esto. Nos ha costado meternos en el partido pero creo que lo teníamos controlado. Recibimos el gol en una segunda jugada de saque de banda de la que tanto provecho sacó el Guadalcacín la temporada pasada con Canty, pero el equipo ha seguido creyendo en su estilo jugando y llegando por fuera y hemos tenido varias ocasiones en la primera parte que no hemos metido, lo que le ha dado aire al Guadalcacín para seguir en el partido en ese tipo de acciones a balón parado. En el descanso, Cuenca me dijo que no sabía si iba a poder aguantar todo el partido por el calor y varios jugadores me han pedido el cambio por la misma razón, pero no podía complacerles al ser varios. Ha sido un partido muy trabajado porque ha habido muchos duelos y batallas individuales, lo que desgasta más si cabe a los jugadores. Les doy un diez a los míos y a los rivales por dejarse la piel con el calor que hacía en el campo. La expulsión de Nico es un contratiempo para el partido ante el Algeciras pero no me vale de nada quejarme. Hay jugadores que quieren entrar y sacaremos el mejor once posible”.
