La jornada del Martes Santo se registra como la prolongación del caótico Lunes Santo. De nuevo la lluvia rompió los esquemas y se convirtió en absoluta protagonista dejando a dos hermandades sin salir y sorprendiendo a las otras tres con un fuerte aguacero en plena calle. Fue a las 13.30 horas cuando la permanente del Consejo recibía en su sede de la calle Cobos, a los integrantes de Sanidad, Piedad, Jesús Caído, Columna y Ecce- Homo. Una reunión que sirvió para barajar los distintos partes meteorológicos y ponerlos en conocimientos los diferentes representantes. Una vez concluida la reunión cada hermandad puso en conocimiento de sus respectivas juntas de gobierno para tomar las pertinentes decisiones.
Sanidad
La Cofradía de Sanidad fue la primera en anunciar la suspensión de la salida procesional, debido a que manejaba unos partes que indicaban lluvia en torno a las doce de la media noche. Según anunciaba su hermana mayor, María del Carmen Castro, “a esa hora la lluvia nos cogería en plena calle por mucho que adelantáramos la salida. Lo vemos inviable”. Una vez suspendida la procesión se llevaron a cabo unas oraciones en el interior del templo y se interpretaron varios motetes por parte de la formación musical y el trío de capilla “Lignum Crucis”.
Piedad
La Hermandad militar de la Piedad fue la segunda corporación nazarena en suspender su estación de penitencia en la Santa Iglesia Catedral a través de un comunicado que su hermano mayor, Juan Carlos Torrejón, hizo público desde el atril de la Iglesia de Santiago.
Las previsiones eran idénticas a las que manejaba la Hermandad de Sanidad, por lo que ellos tampoco vieron posible adelantar su salida, ni siquiera recortar un itinerario que a esa hipotética hora, podría sorprenderles en la calle Valverde o Barrié, calles aún bastante alejadas de su sede canónica. Así las cosas y ante la imposibilidad de estar recogida antes de la media noche, la hermandad decidió cortar por lo sano y sin demasiada demora suspender la salida.
Cabe recordar que el Santísimo Cristo de la Piedad fue realizado por el genovés Francesco María Mayo en 1754 y muestra en su terso semblante y en la suave caída de su cuerpo, la tranquilidad prodigiosa del que ya no sufre. Ante una talla de tamaña calidad, la cofradía no quiso poner en riesgo su máximo legado patrimonial y devocional.
Jesús Caído
Bien distinto fue el caso de la hermandad de Jesús Caído, que por su ubicación y hora de salida, sí vio con buenos ojos adelantar en media hora su salida y regresar antes de que la lluvia pudiera aparecer. Nuestro Padre Jesús Caído y María Santísima de los Desamparados salen cada Martes Santo con casi trescientos penitentes, más la Agrupación Musical Virgen de la Oliva de Vejer de la Frontera y la Banda de Música 'Ntra. Sra. de Palomares' de Trebujena. Pero como la meteorología no es un ciencia exacta, la hermandad salió media hora antes pero el chubasco hizo lo mismo sorprendiéndoles justo cuando el paso de misterio se encontraba en la puerta de San Francisco y el de la Virgen en el callejón del Tinte.
Columna
Sin duda fue la Archicofradía de Columna la más damnificada cuando la lluvia hizo acto de presencia pues, por la situación en la que se encontraba, no tenía cerca ningún templo donde refugiarse. El paso de misterio entraba en la plaza del Palillero y el palio de las Lágrimas detenido en plena plaza de Candelaria. Aceleraron el paso y a paso de horquilla fueron ganando metros hasta conseguir alcanzar la Parroquia de San Antonio con bastante agua sobre el recién dorado paso de misterio y sobre un techo de palio desde el que se veía caer el agua a chorros. La cofradía de Columna se encerró pasadas las doce y media de la noche.
La hermandad de Columna estrenó en 2019 un itinerario por las calles cercanas al inicio de la carrera oficial que dejó imágenes muy hermosas con la imagen del Señor, obra de Jacinto Pimentel y el paso de palio de la Virgen de las Lágrimas por la Plaza San Agustín, San Francisco, Nueva o la Plaza San Juan de Dios. Ayer,se repitieron esas imágenes y con numerosas personas acompañando al cortejo por el centro neurálgico de Cádiz. En el apartado de estrenos la cofradía de San Antonio lució una nueva saya blanca bordada en plata del siglo XVIII para la Virgen de las Lágrimas. Sobretecho del paso de palio inspirado en un repostero del siglo XVIII que luce el antiguo escudo de la Archicofradía. Restauración de la candelería por Orfebrería Andaluza, 20 túnicas de penitentes de cola con esparto para el cortejo, nuevos faldones también para el paso de palio y dos ángeles en madera para el frontal del paso de misterio realizado por Luis González Rey.
Ecce-Homo
La Hermandad del Ecce-Homo fue la única Cofradía que pudo refugiarse en la Catedral cuando el citado chubasco rompía en la capital gaditana. Una parada que sirvió para que Jaime Calderón, secretario de la cofradía y el hermano mayor, Ramón Sánchez, se dispusieran a rezar el rosario mientras la lluvia disminuía. Una vez que la lluvia cesó, cuando ambos pasos pudieron salir a la calle y continuar con el itinerario previsto camino de la Conversión de San Pablo. La hermandad fue la encargada de cerrar la jornada a la 01.40 horas, en un momento emotivo donde el palio, dirigido por el periodista y capataz Melchor Mateo, se despedía pausadamente al son de la marcha Ecce-Homo, todo un clásico de la música cofradiera gaditana.
