Iberia y BA anunciaron ayer la firma del acuerdo “definitivo” para la fusión, aunque fuentes de la compañía española indicaron a Efe que el acuerdo se debe tomar como un paso más, ya que la operación no se cerrará definitivamente hasta noviembre o diciembre.
La nueva compañía aérea se va a convertir en la tercera de Europa, por detrás de Lufthansa y de Air France-KLM, y la quinta del mundo, al añadirse a esas dos europeas, las estadounidenses Delta Air Lines y American Airlines; contará con 408 aviones y volará a 200 destinos, con una media anual de pasajeros superior a los 60 millones.
La operación está diseñada en función de los plazos que debe mantener BA para llegar a un acuerdo sobre el fondo de pensiones de sus trabajadores, donde se debe financiar una cifra próxima a los 3.000 millones de euros.
La compañía británica tiene hasta el próximo 30 de junio para cerrar un acuerdo con los gestores de esos fondos, y posteriormente las autoridades reguladoras cuentan con tres meses para dar su aprobación a ese acuerdo.
Posteriormente a ello, se deben celebrar Juntas Extraordinarias de Accionistas de cada compañía para que den su espaldarazo definitivo a la fusión.
Así mismo, la Comisión Europea debe recibir la notificación de la fusión para que sea este organismo el que dé su “visto bueno”, según anunció desde Bruselas ayer la portavoz comunitaria de la competencia, Amelia Torres.
Los representantes sindicales de los trabajadores de ambas compañías han recibido la noticia con “agrado” y, en principio, la “apoyan”, aunque tanto desde España como desde el Reino Unido se solicita que se garantice el empleo en ambas aerolíneas.
El anuncio de ayer recoge los principales términos y condiciones del acuerdo de fusión de iguales (MOU) que se firmó el 12 de noviembre pasado, que supone la creación de una nueva sociedad empresarial que se denominará International Airlines Group, aunque tanto Iberia como British van a mantener sus respectivas marcas.
Los accionistas de British Airways recibirán una nueva acción de la nueva sociedad por cada título que posean, mientras que los de la aerolínea española obtendrán 1,0205 acciones por cada una que tengan de Iberia.
De acuerdo con lo firmado en noviembre, como consejero delegado de la nueva compañía estará Villie Walsh, que ocupa el mismo cargo en la aerolínea británica; su presidente será el actual de Iberia, Antonio Vázquez, y el cargo de vicepresidente será ocupado por el presidente de BA, Martin Broughton.
La sede social de International Airlines Group estará en Madrid, mientras que la financiera y operativa se situará en la capital británica, Londres.