Más de un centenar de adultos han participado esta tarde en la reunión abierta convocada por el AMPA del Colegio Carlos III contra la despeatonalización de la calle Veedor, en la que han estado presente al menos una veintena de niños y niñas que han sido protagonistas del encuentro.
Una pareja de la Policía Local se personó en la plaza de El Mentidero justo antes del inicio de la asamblea para advertir de que el encuentro no había sido debidamente comunicado y conminar a los padres y las madres a que impidieran que los pequeños, que estaban dibujando con tiza en la calzada, cortaran el tráfico del lateral por motivos de seguridad.
Durante el transcurso de la reunión, también se animaron a tomar la palabra para corear que están a favor de la peatonalizar y, posteriormente, una chica del grupo, de no más de diez años, explicar que la entrada y la salida del centro educativo no es segura ahora “porque la gente (que conduce) no mira mucho y es peligroso”.
Este fue el mejor resumen de una reunión abierta en la que Laura Gallego, presidenta del AMPA, animó a poner sobre la mesa propuestas, además de las acordadas en esta jornada, entre otras, la recogida simbólica de firmas en contra de la reapertura de la vía al tráfico de forma física y también virtualmente por medio de la plataforma change.org, llevar a los pequeños al colegio con un chaleco amarillo para visualizar el problema o constituir una plataforma con todos los agentes implicados, vecinos, comerciantes, hosteleros y padres y madres de alumnos de otros colegios e institutos, hasta que el alcalde, Bruno García, acepte, al menos, sentarse para, si no dar marcha atrás, valorar otras opciones.
En este sentido se expresó Moisés Velasco, de La Zancada, quien defendió el cierre de la vía al menos cuando los escolares acceden y abandonan las instalaciones educativas, como la propia asociación Radio Taxi contempla.
La cuestión, remarcó la presidenta del AMPA, es que, de acuerdo a la normativa, se garanticen itinerarios seguros en el entorno del Carlos III. En este punto, recordó que el concejal responsable de Educación y Movilidad, José Manuel Verdulla, ha sido director de un colegio y, sin embargo, no da cumplimiento a lo dispuesto en la ley para crear espacios amables en las inmediaciones del centro educativo.
El problema, lamentó, por su parte, Esther Mata, presidenta del AMPA La Pepa, del IES San Severiano, también se produce en Puertas de Tierra, donde el anterior equipo de Gobierno se comprometió a trasladar la parada del autobús, pintar un paso de peatones y ampliar la acera para evitar el apelotonamiento de hasta 1.000 personas, entre alumnos y docentes a la salida, y el actual ha guardado el proyecto en un cajón.
Entre las intervenciones más aplaudidas en la reunión abierta, destacó la de Juan Chicón, hijo del propietario del señero Ultramarinos Bar El Veedor. Chicón relató que el pasado viernes, dos agentes de la Policía Local pidieron al establecimiento la retirada de tres mesas y doce taburetes del exterior del local, pese a contar licencia, utilizadas especialmente por clientes con movilidad reducida o con mascotas, para facilitar el tráfico. El conocido hostelero aseguró que está dispuesto a renunciar a la terraza, pero no a que se retroceda en la conquista de derechos para los vecinos y la seguridad.
Chicón introdujo, asimismo, la clave medioambiental. Apuntó que, de acuerdo a la legislación europea, tendrá que dejar de utilizar un vehículo del año 2000 para acceder al casco histórico, zona de bajas emisiones. “Si vamos a modernizar, modernicemos todos”, agregó en defensa de un modelo de ciudad que privilegie al peatón.
Finalmente, expresaron su apoyo a la peatonalización comerciantes, como la responsable de la farmacia de la plaza, representantes de Marea Verde o el vicepresidente de la AVV El Carmen de los barrios de El Mentidero y San Lorenzo Mártir, Armando Vicente, quien aseguró que respalda la demanda de los afectados “al 100 por 100” y lamentó que el Ayuntamiento no les informó de la reapertura de la calle Veedor al tráfico.
