El entrenador del Cádiz, Sergio González, declaró este jueves, un día antes de visitar al Alavés en partido que abre la vigésima primera jornada de LaLiga, que en caso de que el presidente, Manuel Vizcaíno, “no quisiera” que hubiese continuado en el banquillo, “no estaría aquí”.
González manifestó en conferencia de prensa no tener “duda” de la implicación de sus futbolistas, “estén acertados o no”, dentro de una situación convulsa por ocupar plaza de descenso y por el desacuerdo que mostró la afición el domingo pasado tras la derrota sufrida en casa ante el Valencia (1-4).
El técnico del Cádiz reiteró estar “dolido” tras el último encuentro liguero y señaló que esta "semana ha sido complicada por la “incertidumbre” generada por los rumores de cambio de entrenador.
Sergio indicó estar “convencido de poder darle la vuelta” a la situación clasificatoria, en la que el equipo gaditano está en decimoctava posición a un punto de la permanencia, aunque con el lastre de sumar dieciséis partidos seguidos sin ganar en LaLiga.
Sobre el Alavés, el técnico catalán expresó que "suele jugar en largo por fuera”, pero sin desdeñar hacerlo “en corto”, precisó.
Sergio González advirtió de que el Cádiz deberá cuidarse de los “centros” del conjunto entrenado por García Plaza, por lo que, a su juicio, tendrán que estar “atentos al robo y a las transiciones" alavesas.
