La tasa de emancipación de los jóvenes ha aumentado a pesar de la crisis, principalmente la de mujeres, y pocos han regresado al hogar paterno por dificultades económicas.
La tasa de emancipación de los jóvenes ha aumentado a pesar de la crisis, principalmente la de mujeres, y pocos han regresado al hogar paterno por dificultades económicas.
“Los jóvenes se han resistido al retorno y los que lo han hecho, mayoritariamente chicos, ha sido hace un año y medio”, según informó el director del Observatorio de la Juventud del INJUVE, Julio Camacho, quien ha explicado que en el primer trimestre de 2005 la tasa de emancipación era del 25,3% y en el último trimestre de 2010 se sitúa en el 27,07.
El porcentaje del nivel de independencia de los jóvenes –de entre 16 y 29 años– ascendió al 29% en el tercer trimestre de 2008 y a partir de esa fecha se registra “un leve retorno” al hogar familiar de algunos de estos jóvenes, añadió, citando los datos de la EPA.
El responsable del observatorio del Instituto de la Juventud de España ha intervenido en la presentación de un estudio sobre la juventud y familia en el ámbito europeo, que concluye que la familia no se encuentra en crisis entre la juventud europea, sino que es el “principal campo de inversión personal”.
Analizando los datos de la European Social Survey de 2006, el informe expone que para los jóvenes europeos la familia es un valor en sí misma, independientemente de los principios y valores religiosos, aunque han cambiado los modelos de familia, que no se definen por vínculos formales sino informales, basados en compromisos privados –como la cohabitación–.
“Asistimos a un incremento de la edad de salida de los jóvenes del hogar paterno en toda Europa”, señaló la coordinadora del estudio, Almudena Moreno, quien recordó que en el 2006, en España el 60% de los jóvenes entre 15 y 29 años permanecían en el hogar paterno, frente al 30,8 de los finlandeses.
La vida en solitario era una opción minoritaria para los jóvenes españoles; el 6% de las jóvenes españolas y el 12% de los españoles, frente al 25% de las mujeres finlandesas y el 36% de los varones de ese país.
El estudio, incluido en la revista de estudios de juventud, recoge otro artículo que habla de una “cierta ruptura con la tradición religiosa en España” respecto a los rituales de formación de la familia y destaca que en 2008, el 57% de los jóvenes de entre 15 y 24 años optaría por la unión libre frente al 36 que opta por el matrimonio religioso.