En las últimas horas se han producido varios robos en hermandades de Cádiz, una oleada de ataques al patrimonio cultural que no es la primera vez que se produce y pone en el foco la inseguridad de estos lugares de culto.
Por un lado, se ha sustraído un ancla a la imagen de Nuestra Señora de la Esperanza, de la Hermandad del Nazareno del Amor. Según explica la propia Junta de Gobierno de la hermandad, “ha vuelto a tener lugar un robo en la capilla donde se encuentran nuestras imágenes Titulares en la Iglesia de San Francisco”. “No se ha encontrado daño alguno en la imagen de Nuestra Señora de la Esperanza, pero lamentamos la pérdida de un ancla donada recientemente que sustituía a la sustraída y no recuperada el pasado año 2023”, por lo que se trata de un hecho ya reincidente.
“Los enseres de mayor valor del patrimonio de Nuestra Señora de la Esperanza ya habían sido retirados tras el pasado Lunes Santo y no tenemos que lamentar mayores pérdidas”, explica la hermandad, que ha puesto los hechos en conocimiento de la policía y ruega difusión “por si en la medida de lo posible se pudiera recuperar por el valor sentimental que tiene”.
También ha sufrido un ataque la Archicofradía de la Merced, de donde ha “desaparecido” un pendiente que se ubicaba en la saya de María Santísima Madre de Dios de la Misericordia. Explica su Junta de Gobierno que el viernes por la mañana se produjo “un robo en la capilla donde se encuentran nuestras imágenes de Nuestro Padre Jesús Nazareno de la Obediencia y María Santísima Madre de Dios de la Misericordia”. No hay daños en las imágenes, pero se lamenta “la pérdida de un pendiente en la saya” de la virgen, rogando también difusión que pueda ayudar a recuperarlo “por el valor sentimental que tiene”.
De un tercer intento de robo ha sido objeto la Virgen de la Amargura, de la Cofradía de la Humildad y Paciencia, en la Iglesia de San Agustín, donde podría haber sido visto el supuesto autor y se han detectado alteraciones en la imagen, aunque sin daños, al intentar robar joyas sin éxito.
Según parece, el autor está plenamente identificado, tratándose en los tres casos del mismo individuo, cuya imagen se ha viralizado en las redes sociales para alertar a otras cofradías.
