El argentino Mauricio Pellegrino, entrenador del Cádiz en los cuatro últimos meses, se despidió este martes del club gaditano, en el que no ha podido evitar el descenso del equipo a Segunda División, y dijo que siente "mucho" que no hayan "logrado el resultado" que deseaban "todos".

"Nos queda el consuelo de haber entregado todo lo que estaba a nuestro alcance", manifestó Pellegrino, que llegó al banquillo del conjunto amarillo el pasado 24 de enero en sustitución del destituido Sergio González, en una carta de despedida y agradecimiento difundida por el Cádiz.

El técnico y exjugador internacional con Argentina, de 52 años, agradeció a todos los estamentos de la entidad cadista "la confianza depositada" en él y en su cuerpo técnico "para asumir el reto de este final de temporada", que aseguró que afrontaron con "toda la ilusión y responsabilidad".

"Me gustaría dar las gracias a mis jugadores por la dedicación, respeto y profesionalismo, dando lo mejor de cada uno a nivel humano. También extender el agradecimiento a todas las personas que hay detrás del equipo que sale al campo, por ayudar cada día a facilitar nuestra labor", indicó el ya exentrenador del conjunto gaditano, que acabó antepenúltimo LaLiga con 33 puntos.

Pellegrino, que logró 18 puntos en los 17 partidos en los que dirigió al Cádiz (4 triunfos, 6 empates y 7 derrotas), también expresó su gratitud a la afición cadista por "el aliento, apoyo y muestras de respeto que siempre" les dio, incluso "en los momentos de dificultad".

"Me despido de ustedes deseando lo mejor para el futuro del Cádiz Club de Fútbol y su gente. Hasta siempre!", concluye su misiva el técnico nacido en la localidad argentina de Leones (Provincia de Córdoba).