Otro puntito para el Cádiz, que no termina de arrancar, pero, al menos, supo empatar un partido que parecía tener perdido.
Con el 0-2 y el Tenerife dominando nada hacía presagiar que al final los gaditanos lograrían un punto, que pudieron ser tres, pero se anuló un golazo a Brian Ocampo. Y gran parte de “culpa” de este empate recayó en el cantero Francisco Mwepu, que logró el 2-2 en el tiempo extra de la segunda parte.
Afrontaba el Cádiz el choque con ánimo de ganar para tener la “colección” completa de resultados tras perder en su estreno liguero y empatar la semana pasada. Enfrente, un Tenerife con dos derrotas, pero con mucho más peligro del que decían los números.
Paco López repitió el equipo titular del Cádiz que tan buena imagen había ofrecido en la primera parte de la visita al Levante, en la que los cadistas sumaron su primer punto de la temporada. De esta forma, David Gil se mantuvo como portero contando con una línea defensiva formada por Víctor Chust y Glauder como centrales, escoltados por Zaldua e Iza Carcelén, este en la izquierda pese a ser considerado lateral derecho.
Fali hacía de “cemento” entre la defensa y el centro del campo, incrustándose entre los centrales a la hora de defender. Por delante, Escalante y Rubén Alcaraz llevaban el timón para repartir juego a unas bandas en las que aparecían Brian Ocampo y Sobrino. Como punta de lanza, Chris Ramos aprovechó de nuevo la lesión de Roger Martí.
Con mal pie, o más bien mala cabeza, empezó el partido. Un tremendo choque entre Fali y Juande dejó a ambos futbolistas muy doloridos. Tanto, que ninguno pudo seguir. Apenas habían transcurrido siete minutos de partido y, tras cinco de parón, ambos equipos realizaron un cambio obligado.
Esta variante no sólo dio al traste con la participación de Fali en el Cádiz, sino que Paco López cambió su plan inicial. Ya no habría esa figura entre línea defensiva y centro del campo. Su sustituto, Ontiveros, se colocó en la mediapunta para dar mucho más poder ofensivo al equipo.
Parecía dominar el juego el equipo local, con más llegada, pero sin remate. Un mal control de Chris Ramos le privó de culminar con éxito un mano a mano porque facilitó la tarea del defensor. Al instante, una mala conducción de Sobrino también le dificultó terminar encarando en solitario al portero visitante, aunque el árbitro anuló la jugada.
El Tenerife no había dado señales de vida en el área cadista, pero marcó a la primera. Un saque de esquina fue prolongado por Gayá hasta el segundo poste, donde entró Diarra para remachar a gol ante David Gil. No era fuera de juego, Iza lo rompía por centímetros en su lucha por ganar la posición a un atacante.
Corría el minuto 26 de partido y el jarro de agua fría fue enorme. El estadio enmudeció a excepción de los seguidores tinerfeños presentes, que celebraron el gol con el que esperaban cimentar sus primeros puntos de la liga.
Intentaron los cadistas encajar el golpe y empatar antes del descanso. Por delante tenían aún 19 minutos de juego y un tiempo extra que sería largo, quedando finalmente en siete minutos. Sin embargo, esa presión, ese ímpetu y ganas no veían su traducción en fútbol. El Cádiz apenas creaba jugadas y no generaba ocasiones.
De nuevo un mal control de Chris Ramos evitó que él mismo se plantase mano a mano ante el portero tinerfeño. Y con esta enésima demostración negativa del ataque local se llegó al descanso.
Sin cambios para la segunda parte
Se reanudó el partido sin más sustituciones en ambos equipos que las obligadas por el choque de los primeros minutos.
Y tampoco cambió el panorama. El Cádiz, muy fallón en cuestiones técnicas, no encontraba cómo hincarle el diente al Tenerife, que conforme pasaban los minutos se iba creciendo.
A los 53 minutos llegó el segundo disparo a portería visitante y también fue gol. Un complicado despeje de Glauder dejó el balón en los pies de Luismi Cruz, que encaró a David Gil y le dedicó una perfecta vaselina. El portuense no tuvo piedad del Cádiz y exhibió su calidad con un gran toque.
David Gil sí pudo evitar el tercer tanto con una segura parada a disparo de Cantero, que aprovechó un rechace tras otra gran jugada de Luismi Cruz. El Cádiz estaba tocado y hundido, pareciendo más probable encajar otro gol que acortar distancias.
Y de nuevo Luismi Cruz en acción, esta vez para dejar atrás como quiso a la defensa local y disparar con rosca muy cerca de la escuadra gaditana.
A los 67 minutos, en busca de controlar algo el balón y generar un mínimo juego, Paco López cambió a los dos mediocentros. Fuera Escalante y Alcaraz, dentro Álex Fernández y Alarcón.
De penalti recortó distancia el Cádiz. El segundo gol de la temporada llegó como el primero: una patada a Chris Ramos supuso una pena máxima, esta vez convertida por Álex Fernández. Tardó unos minutos el árbitro en decretarlo y fue gracias a la intervención del VAR, ya que en primera instancia se había saldado la jugada con amonestación a Chris Ramos por simulación que no fue tal.
Con el 1-2 y ánimos renovados afrontaban los locales el cuarto de hora final de un partido que parecían tener perdido poco antes.
A los 82 minutos, cielo e infierno en un instante. Mwepu recupera para la causa un balón que se perdía por la línea de fondo y sirve para que Brian Ocampo baile a la defensa visitante para lanzar un latigazo pegado al poste que era el empate a dos goles. Estalló el uruguayo y con él las gradas, que veían posible el milagro. Pero de nuevo actuó el VAR, esta vez para anular jugada por un más que discutible fuera de juego de Mwepu al inicio de la jugada.
Diez minutos de tiempo añadido es lo único que tenía el Cádiz por delante. Por intentarlo no iba a quedar, pese a la decepción del golazo anulado a Ocampo.
¡Y llegó el premio! El canterano Mwepu intentó rematar de cabeza y no le salió bien, pero enseguida se rehizo para chutar con la pierna y empatar el partido a los 92 minutos.
Lejos de conformarse, el equipo local buscó la remontada asumiendo tales riesgos que incluso pudo perder si no se hubiese pitado falta a Matos en una jugada que terminó en gol visitante. Pese a ese arreón final, el marcador ya no se movió más y el reparto de puntos se hizo efectivo.
- Ficha técnica -
2 – Cádiz CF: David Gil; Zaldua (Iván Alejo, min. 59), Víctor Chust, Glauder, Iza Carcelén (Matos, min. 80); Fali (Ontiveros, min. 13), Escalante (Álex Fernández, min. 67), Rubén Alcaraz (Alarcón, min. 67), Sobrino (Mwepu, min. 80), Brian Ocampo; y Chris Ramos.
2 – CD Tenerife: Nadal; Mellot, Juande (Gayá, min. 13), Rubén Alves, David Rodríguez (Guerrero, min. 75); Bodiger, Diarra, Luismi Cruz (Corredera, min. 87), Waldo (Enric Gallego, min. 75); Maikel Mesa (Teto,min. 87) y Ángel (Cantero, min. 61).
Goles: 0-1: Diarra (min. 26); 0-2: Luismi Cruz (min. 53); 1-2: Álex Fernández (penalti, min. 73); y 2-2: Mwepu (min. 94).
Árbitro: Lax Franco (comité murciano). Amonestó a Ontiveros (min. 22), Rubén Alves (min. 36), Brian Ocampo (45+7), Rubén Alcaraz (min. 51), Nadal (min. 65), Iván Alejo (min. 71), Álex Fernández (min. 72), Alarcón (min. 81) y Cantero (min. 90). Expulsó con roja directa al entrenador del Tenerife, Óscar Cano (min. 96)
Incidencias: 16.518 espectadores en el estadio Nuevo Mirandilla para presenciar el partido, correspondiente a la tercera jornada de liga en Segunda División. Se guardó un minuto de silencio en memoria de Francisco García Gómez
Paquito, entrenador del Cádiz CF en la temporada 1985-1986. Presencia de seguidores del Tenerife en la grada de Preferencia Alta.