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Autonomía Obrera ha presentado una denuncia ante la inspección de trabajo y seguridad social y ante la Consejería de Industria de la Junta de Andalucía por "riesgo eléctrico" en el Ayuntamiento de Cádiz, al tiempo que ha lamentado la "negligencia" de la administración regional y local que "hace la vista gorda" tras verificar, hace más de un año, que las instalaciones eléctricas de la casa consistorial incumplen las normativas y estándares de seguridad mínimas exigidas "importándole lo más mínimo la seguridad del personal y de los ciudadanos que la transitan".
En octubre de 2023, el sindicato presentó ya una denuncia ante la Consejería de Industria alertando del mal estado del sistema e instalaciones eléctricas del edificio ubicado en la plaza de San Juan de Dios. Además, informaron que dicho establecimiento no ha sido nunca inspeccionado por Industria, pero incumple la normativa de electricidad y también tiene carencias en el plan de emergencias a ejecutar en caso de siniestro. Por ello, se solicitó una inspección por parte del departamento correspondiente, para "comprobar si los sistemas e instalaciones eléctricas del edificio municipal cumplen con la normativa actual, y si no es así, se tomen las medidas oportunas para su corrección y evitar los riesgos eléctricos a trabajadores y usuarios de la casa consistorial".
Desde entonces, subraya Autonomía Obrera, "no se ha hecho absolutamente nada" tras recibir una inspección negativa. "El Ayuntamiento ha ignorado el informe técnico (OCA) emitido por una empresa autorizada, donde se indican los incumplimientos de seguridad eléctrica y las medidas a tomar, y la Consejería de Industria, negligentemente en su deber, no ha hecho nada al respecto, mirando para otro lado, a pesar de estar al tanto del problema y teniendo la responsabilidad de vigilar y actuar ante la pasividad e irresponsabilidad del Ayuntamiento", agrega el sindicato.
Autonomía Obrera pone de manifiesto la "dejadez de ambas administraciones ante los riesgos de cortocircuitos, incendios, daños a las personas, objetos y propiedad, que son cada vez mayores. Ambas serán las responsables de las consecuencias en caso de accidente o siniestro, ya que las aseguradoras no cubren daños si no hay certificación favorable de la inspección realizada por el organismo de control autorizado (OCA) y en este caso es negativa", advierte.
Los representantes de los trabajadores recuerdan también el "ruinoso estado de la segunda planta del edificio, que se cae a pedazos" con aseos clausurados, salidas de emergencias inaccesibles, humedades, excrementos de palomas, aparición de cucarachas y plagas de arañas por diversos departamentos, grietas en paredes y techos, lámparas con sujeciones oxidadas y riesgo de caída, hacinación del personal funcionarial en los distintos departamentos de la planta baja y la atención tercermundista a las personas usuarias.
