El Gobierno de Rusia ha reiterado este miércoles la necesidad de que Naciones Unidas y la Liga Árabe abran una investigación en torno a la matanza de más de 270 personas en el barrio periférico damasceno de Daraya.
"Es otro crimen de naturaleza provocadora. Moscú condena estos terribles y bárbaros actos de condena", ha dicho el Ministerio de Exteriores ruso a través de un comunicado oficial. "Al mismo tiempo, insistimos en la necesidad de que se abra una investigación imparcial sobre las circunstancias de la última tragedia", ha agregado.
Asimismo, ha recalcado que "todos los responsables de estos crímenes han de ser juzgados y castigados severamente", al tiempo que ha reiterado que no hay alternativa al plan de paz del exenviado conjunto de Naciones Unidas y la Liga Árabe, Kofi Annan, y a los acuerdos alcanzados en Ginebra, según ha informado la agencia rusa de noticias RIA Novosti.
El Gobierno sirio informó el domingo de que sus fuerzas de seguridad "limpiaron" Daraya de "los vestigios de terroristas mercenarios". Activistas sirios han denunciado la ejecución de 270 personas en este barrio durante la ofensiva militar.
"Nuestras valientes fuerzas armadas han limpiado el barrio rural de Damasco de Daraya de los vestigios de terroristas mercenarios, eliminando a un número de ellos, y ha confiscado sus armas y munición", reportó la agencia estatal de noticias siria, SANA.
Además, SANA precisó que las fuerzas de seguridad sirias desactivaron numerosos "explosivos de fabricación casera" y se incautaron de "un ingente arsenal de paquetes bomba".