El presidente de la Junta, Juanma Moreno, inaugurará el próximo 15 de agosto los dos tramos de la alameda principal de Málaga, liberando el lateral norte de la avenida de las obras del metro y permitiendo que esta sea peatonal por este área. El Consejo de Gobierno autorizara el gasto del contrato de ejecución de las instalaciones y arquitectura de las estaciones de los dos tramos del Metro de Málaga en construcción, que discurren desde El Perchel-María Zambrano hasta Atarazanas,
con un kilómetro de longitud en total. El presupuesto base es de
más de 33,5 millones.
Ha indicado que se seguirá trabajando en el suburnao de forma subterránea para que cuanto antes el metro pueda llegar al centro de la ciudad.
Bendodo también ha manifestado que este Gobierno, desde el minuto uno, tenía claro que había que solventar el “suplicio que llevan años pasando los malagueños por las obras del metro en el centro de la ciudad”. Ha dicho que los socialistas prometieron la
inauguración de toda la línea del metro de Málaga el 11 de noviembre de 2011, hace ochos años, y, sin embargo, todavía “está la ciudad levantada”.
La licitación autorizada comprende el
suministro e implantación de los equipamientos y dispositivos imprescindibles para la electrificación, ventilación, comunicaciones, protección contra incendios y drenaje y bombeo de este trazado, entre otros elementos. También incluye los acabados arquitectónicos de las estaciones de Guadalmedina y Atarazanas.
Este contrato, imprescindible para la explotación comercial, complementa las obras en curso tanto en el tramo Renfe-Guadalmedina como Guadalmedina-Atarazanas. Estos trabajos se circunscriben a la obra de infraestructura (túnel y estaciones) y a la urbanización y colocación de la vía en el caso del segundo tramo, ya que para el trazado Renfe-Guadal-medina se trabaja en la licitación de superestructura de vía.
Conforme a la modificación del contrato de concesión de las
líneas 1 y 2 del Metro de Málaga de julio de 2014, la Consejería de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio, a través de la Agencia de Obra Pública, asumía la contratación de las obras e instalaciones y sistemas de los dos tramos mencionados, que son los que se encuentran actualmente en avanzada ejecución de la infraestructura.
Estos dos tramos permitirán la continuidad del metro desde el Perchel-María Zambrano, donde
confluyen las líneas 1 y 2, hasta el centro histórico, discurriendo bajo la Avenida de América, Callejones del Perchel, Avenida de la Aurora, Plaza de Manuel Alcántara, Avenida de Andalucía, Puente de Tetuán y, finalmente, la Alameda Principal, en cuya confluencia con la calle Puerta del Mar se localizará la estación Atarazanas.
En el ámbito de la arquitectura, el nuevo contrato incluye la
instalación de las escaleras mecánicas y pedestres y de los ascensores, así como todo lo que forma las llamadas bocas de metro. La estación de Guadalmedina constará de tres accesos, mientras que la de Atarazanas dispondrá de una.
En materia de instalaciones, el adjudicatario tendrá que ejecutar todos los equipamientos relativos al
suministro eléctrico y la electrificación, que permite el funcionamiento del metro y de todos sus dispositivos; los equipos para la ventilación; los detectores y equipos de extracción para la protección contra incendios, así como la red de drenaje y bombeo.
En el ámbito de sistemas de comunicaciones, el contratista tendrá que acometer la
sala de control local de ambas estaciones para su conexión con el Puesto de Control Central, la red de comunicaciones wifi y de radiofrecuencia digital, así como las máquinas de billetaje, líneas de validación, megafonía, teleindicadores y resto de sistemas auxiliares.