Este año tampoco habrá Rocío. Solos se vuelven a quedar los caminos y sola se queda la aldea, mientras la Blanca Paloma aguarda, en Almonte, que llegue ese momento en que se pueda volver a celebrar la romería y la pandemia sólo sea una mala pesadilla del pasado.
Sin embargo, este jueves Huelva vivió su jornada más rociera. Este año no hay romería, pero no es igual que 2020. Hay esperanza y se vislumbra el final. Por ello, la Junta de Andalucía decidió celebrar un emotivo acto que se vivió en hermandad y con las emociones a flor de piel.
El tamboril volvió a sonar, y las 25 hermandades filiales de la provincia de Huelva, junto a la Hermandad Matriz de Almonte, pudieron al fin reencontrarse y disfrutar de un sentido acto que, bajo el título de ‘Esperando volver a caminar’, estuvo marcado por un claro mensaje de esperanza por parte de los representantes de la Administración andaluza, que han querido destacar el esfuerzo y la labor realizada por las hermandades onubenses, a las que se les ha hecho entrega de un recuerdo de la celebración de este jueves.
En esta misma línea, se ha reconocido el trabajo de todas las personas que, desde diferentes ámbitos -la seguridad, el cuidado del medio ambiente y el bienestar animal, la ordenación del tráfico, la asistencia sanitaria, etcétera- hacen posible cada año la puesta en marcha del Plan Romero.
En ese sentido, la delegada de la Junta de Huelva, Bella Verano, ha querido resaltar el trabajo previo de todos los operativos implicados en el Plan Romero.
“Son muchas las horas de esfuerzo, las largas reuniones del personal técnico con los representantes de las hermandades, la supervisión y visita a pie de campo de los caminos por parte de los operativos, el montaje y organización de las zonas de sesteo y de pernocta, el diseño del despliegue sanitario, la instalación de cubas, contenedores, la adecuación de vías para el tránsito de peregrinos, carruajes, charres, tractores y animales y un largo etcétera”.
Por su parte, el viceconsejero de la Presidencia, Administración Pública e Interior de la Junta, Antonio Sanz, ha reafirmado el compromiso del Gobierno andaluz con el movimiento rociero a través del Plan Romero y sus cuatro despliegues: Caminos en Huelva, Cádiz y Sevilla y Dispositivo Aldea.
Al respecto, ha trasladado a las hermandades rocieras de la provincia de Huelva que en estos dos años en los que no se ha celebrado la romería del Rocío el Gobierno andaluz ha seguido trabajando en el perfeccionamiento y mejora del Plan Romero.
Sanz ha explicado que “la pandemia ha transformado nuestras vidas y nos ha quitado muchas cosas, pero no la esperanza de volver a celebrar la romería del Rocío de forma segura: por eso, mantenemos inamovible nuestro compromiso con la familia rociera, intacto nuestro compromiso con la seguridad y la protección de los andaluces, y estamos invirtiendo este tiempo en seguir mejorando y perfeccionando uno de los dispositivos de seguridad más importantes del Sur de Europa: el Plan Romero”.
En este sentido, el viceconsejero de la Presidencia ha subrayado que “la espera para volver a celebrar la romería está siendo una espera activa. Los servicios de emergencia de la Junta han seguido trabajando para que, cuando la pandemia lo permita, podamos volver a activar el Plan Romero con el fin de garantizar la seguridad de los peregrinos, la protección del medio ambiente y el bienestar animal”.
Todo está, por tanto, listo para volver a celebrar el Rocío. Mientras, actos como el de este jueves, que terminó con la Salve Rociera, hacen más llevadera la espera. Ya queda menos.
