Verdemar alerta de la gran cantidad de plásticos en la ribera del río Guadiaro. Concretamente se localiza (y seguramente habrá más) cerca del  Cortijo de Matavaquilla viniendo desde Tesorillo y bajando por un carril próximo, en San Roque.

Este episodio se produce principalmente por el poco civismo que tienen los visitantes de esa zona para uso y disfrute del entorno. En este caso se confunde el disfrute con el maltrato del espacio natural que conforma el Guadiaro. Ciudadanos (que incluso hacen noche en el paraje)  se deshacen de los residuos sin ser conscientes del daño que se le hace a los ríos y el grave impacto que supone hace que esa acumulación  se convierten en cifras alarmantes como señala Phys.org que suma un total cada año de hasta 8 millones de toneladas de plásticos, que terminan en ríos y mares. Lo que conlleva un gran impacto económico y en los ecosistemas marinos. El acumulado hasta ahora, The Ocean Cleanup, es de unos 3 billones de toneladas. Convierte recordar que, al ritmo actual, en el año 2050 la masa de plástico en los océanos superará a la masa de peces.

Los ríos Guadiaro y Hozgarganta se localizan en el sur de la Península Ibérica y discurren entre Málaga y Cádiz. El río Guadiaro, procedente de la Sierra de Ronda, y su tributario, el río Hozgarganta, desde la Sierra del Aljibe se unen en la plataforma litoral gaditana para desembocar finalmente en el Estuario del Guadiaro. El tramo más próximo a la N-340 se corresponde con la Zona de Especial Conservación de los Ríos Guadiaro y Hozgarganta (ES6120031), la cual conecta el litoral y los espacios protegidos de la Red Natura 2000, Estuario del Río Guadiaro (ES6120003) y Fondos Marinos Estuario del Río Guadiaro (ES6120034), con el espacio de Los Alcornocales (ES6170016), aportando un destacado valor ecológico y paisajístico al entorno de la carretera. Un espacio natural sensible a cualquier impacto que sufra tanto en la flora como en la fauna y al ecosistema en general.