La sección séptima de la Audiencia Provincial de Cádiz, con sede en Algeciras, ha decretado la revocación de la libertad bajo fianza de los hermanos Francisco y Antonio Tejón, acusados de liderar el clan de los Castañitas, una de las mayores organizaciones de tráfico de hachís del Campo de Gibraltar, con base en La Línea, donde reside la familia.
Así, varios furgones de la Policía Nacional han efectuado el traslado de Francisco, conocido como Isco, a prisión, ya que la decisión de la sala de que regrese a la cárcel de manera provisional, comunicada y sin fianza, se ha cumplido con carácter inmediato.
Hoy se ha celebrado una vista a consecuencia del recurso planteado por el Ministerio Fiscal contra el auto del Juzgado de Instrucción Número 2 de La Línea de la Concepción, que decretó la puesta en libertad bajo fianza de ambos hermanos, si bien uno de ellos, Antonio, permaneció en prisión por otra causa.
La Fiscalía ha alegado un “alto riesgo” tanto de fuga –ha recordado que Antonio estuvo dos años en situación de búsqueda tras escapar, precisamente, durante un permiso penitenciario- como de reincidencia delictiva y considera “insignificante” la fianza acordada en su día, de 120.000 euros en el caso de Isco y de 200.000 euros para Antonio.
La defensa, por su parte, considera que las acusaciones se basan en “la convicción policial” y en sospechas e indicios “de risa”, al tiempo que defiende, en el caso de Isco, que ha cumplido de manera estricta con las medidas acordadas para su salida bajo fianza.
Isco ha comparecido hoy ante el tribunal y ha manifestado que quiere que “llegue el juicio para poder” defenderse, al tiempo que ha criticado a la prensa, que lleva tres años “dándole”.
Acompañado por un pequeño grupo de familiares y allegados, Isco ha recordado que se entregó de manera voluntaria y que no ha “fallado a la confianza” del juez tras su puesta en libertad, acudiendo cada lunes y viernes al juzgado.
Su abogado alega que el acusado “no tiene antecedentes penales, están cancelados”, y responsabiliza a la Fiscalía de provocar una “gran presión mediática” sobre el caso al “publicitar el recurso de apelación”.
Antonio, interno en la prisión de Albolote (Granada), ha declarado por videoconferencia que sabe que ha “cometido fallos”, por los que pide “perdón”, y que ahora espera “cumplir la condena” para poder estar con su familia.
Su abogada ha explicado que, de los 18 meses que lleva en prisión, “ocho han sido en aislamiento” y que comparte espacio con “tres personas que cumplen condena por terrorismo”.
Al igual que el otro letrado de la defensa, considera que el Ministerio Fiscal “habla más para la prensa que para esta sala” y defiende el “arrepentimiento” de su cliente y la predisposición a cambiar de vida, con sus siete hijos escolarizados y un taxi para trabajar.
El caso, cuyo juicio aún está pendiente de fecha y en el que hay más de una veintena de investigados, se ha separado en varias partes.
De esta manera, el Juzgado de Instrucción número 2 de La Línea cursará las acusaciones de delitos contra la salud pública y organización criminal, mientras que el Juzgado de Instrucción número 1 de Algeciras asume la causa por presunto blanqueo de capitales.
La Fiscalía, que estima que el patrimonio de los Castañita está en torno a los veinte millones de euros, pide una pena de quince años de prisión para cada uno de los hermanos Tejón y señala la “extrema gravedad” de los hechos.
