El Córdoba, que marcó en sus dos únicas ocasiones a lo largo de todo el partido y que tuvo en Pedro, precisamente un exmurcianista, a su jugador clave, ganó por 1-2 al Real Murcia y se jugará el ascenso a la Liga BBVA el jueves y el domingo ante la UD Las Palmas.
El partido empezó con mucho movimiento y cuando únicamente habían transcurrido cinco minutos el árbitro Jaime Latre decretó penalti por derribo de Juanlu sobre Eddy. Sin embargo, Saúl Berjón lo desaprovechó al tirarlo fuera a la derecha del portero Juan Carlos.
Apenas un minuto después, un balón perdido por Wellington Silva dio paso a un centro de Juanlu medido a la cabeza de Pedro, quien libre de marcaje en el área pequeña, batió a Casto.
Estas dos acciones, que se antojaban claves en el transcurso de la eliminatoria después del 0-0 registrado en la ida en el estadio Nuevo Arcángel de Córdoba, reforzaron al cuadro andaluz en su planteamiento y los de Albert Ferrer, basado en el orden defensivo y triangulando en su juego de creación, manejó el encuentro durante la primera media hora, aunque sin más ocasiones de gol.
El equipo dirigido por Julio Velázquez, ansioso y precipitado, carecía de ideas para inquietar a la zaga rival cuando necesitaba dos goles para pasar a la siguiente ronda y al descanso se llegó con la sensación de que el Córdoba lo tenía todo bajo su control.
El técnico grana, en busca de encontrar la mordiente que su equipo no tenía, inició la segunda parte con Malonga en lugar de Dani Bautista -un delantero por un central-, mientras que el preparador visitante dio entrada a Raúl Bravo en sustitución de Juanlu. Un central reconvertido a mediocampista en lugar de un extremo.
Estas maniobras dieron como consecuencia que el Murcia adelantó líneas y metió a su oponente en el área propia. Así, una acción individual del brasileño Wellington Silva con conducción de balón precisa y remate certero niveló el partido, que no la eliminatoria.
La alegría local duró poco, porque cuando más apretaba el cuadro murcianista y su afición llegó un buen centro de Pedro para el cabezazo inapelable de Raúl Bravo que supuso el 1-2 en una acción a la contra ante el desajuste de la defensa grana.
Saúl Berjón, hasta por tres veces; Iván Moreno, en dos ocasiones; Kike García, Wellington y Eddy remataron fuera y el propio Eddy probó a Juan Carlos en llegadas de un Murcia que no se resignó y continuó creyendo en la remontada. De hecho, acabó el encuentro con seis jugadores de clara vocación ofensiva ante un rival que se limitó a defender sin sacar provecho de los muchos espacios que quedaban a la espalda del centro del campo rival.
Malonga y Wellington tuvieron las últimas ocasiones del partido, pero ambos estrellaron el balón contra cuerpos de defensores cordobesistas y ahí se esfumaron las opciones de los de Velázquez y el francés, además, cerró el encuentro estrellando el esférico en el larguero, por lo que ni siquiera evitó la derrota de un equipo que, pese al revés, fue despedido con aplausos mientras el Córdoba celebraba que seguirá peleando por subir a la máxima categoría.