El Real Madrid no encontró rival ante un ramplón UCAM Murcia, al que venció por 86-69, y decidió economizar fuerzas, algo que nunca viene mal a estas alturas de la temporada en la que la acumulación de partidos comienza a pasar factura.
Cuando un equipo ha perdido los últimos diecinueve partidos contra el rival al que se enfrenta y nunca ha ganado en su pista, en catorce visitas, es casi hasta normal que salte a la pista con los brazos abajo y pocas expectativas de nada. Es lo que le ocurrió al UCAM Murcia, sobre todo en el primer cuarto.
La inactividad de los murcianos favoreció la defensa del Real Madrid en los primeros minutos de partido, 10-1 en el minuto 7. El UCAM Murcia se limitó a tirar de tres, con escaso acierto (0-8 en el primer periodo) y poco más.
El Real Madrid tampoco se esforzó demasiado, no fue necesario, y con Slaughter y Mirotic a la cabeza de la anotación llegaron a un 19-5 al final del primer cuarto.
Óscar Quintana tardó en que reaccionaran sus jugadores, pero parece que lo logró mínimamente en el segundo cuarto, poniendo experiencia (Berni), un poco de aptitud y una defensa en zona, presionante tras canasta.
El Real Madrid se encontró con el Sergio Rodríguez más anotador (13 puntos en el segundo cuarto) y levantando mínimamente el pie del acelerador se puso a trabajar pensando en otros envites más importantes.
Laso ordenó a sus jugadores perfeccionar la defensa en zona y disfrutó de los momentos de relajación que le permitió una amplia ventaja en el marcador, 43-27 al descanso.
Con el objetivo de ambos equipos perfectamente definido: no salir con una paliza sonrojante, los murcianos y no gastar demasiadas energías en el victoria, el Real Madrid, el resto del partido fue demasiado previsible y poco estético.
Un contraataque con la magia de 'Chacho' Rodríguez y la finalización de Rudy Fernández fue lo más destacado de los últimos diez minutos.
Los dos equipos consiguieron lo que se propusieron y el Real Madrid sigue siendo líder y único invicto en su feudo tras el 88-69 final. Además la racha contra el Murcia se extiende hasta un 20-0.
Rudy (13 puntos), Mirotic (17), Rodríguez (11), Carroll (10) y Llull (12) se repartieron la anotación como buenos hermanos, mientras que Tillie se aprovechó de la tranquilidad defensiva del Real Madrid y anotó 24 puntos.