En busca de su undécima Copa de los Mosqueteros, descorchó su triunfo más demoledor en el actual torneo: ganó por 6-3, 6-2 y 6-2 y en una hora y 58 minutos
El español Rafael Nadal, número uno del mundo y vigente campeón de Roland Garros, fue un ciclón que no pudo controlar el francés Richard Gasquet para sellar su pase a los octavos de final, fase en la que se enfrentará al joven alemán Maximilian Marterer.
En busca de su undécima Copa de los Mosqueteros, Nadal descorchó su triunfo más demoledor en el actual torneo: ganó por 6-3, 6-2 y 6-2 y en una hora y 58 minutos.
Y de paso agrandó sus estadísticas ante un Gasquet al que ha vencido en las 16 veces que han jugado en el circuito profesional.
La mejor raqueta del mundo suma y sigue en su torneo fetiche y este sábado acumuló 34 sets consecutivos ganados en la arcilla parisina, una marca que solo supera -de momento- Bjorn Borg, entre 1979 y 1981.
"Hoy he jugado muy bien. Lo siento por él (Gasquet) es un buen amigo y muy buena persona, es alguien muy importante para el circuito", resumió el español, quien mañana, domingo, cumple 32 años.
Seguramente Gasquet nunca imaginó que aquel chaval al que se enfrentó en 1999 en un torneo de juveniles cuando los dos tenían 13 años le iba a dar tantos dolores de cabeza en el circuito profesional.
La raqueta francesa, quien venció a Nadal aquel primer encuentro no profesional, prolongó su calvario ante el español.
Desde que los dos compiten en la ATP, ya son 16 las veces que el galo se ha inclinado ante el mallorquín, contando el inapelable triunfo de este sábado.
Lo cierto es que lo que sucedió en la Philippe Chatrier reflejó la diferencia entre el número uno del mundo y vencedor de los cuatro grandes y el número 32 ganador de 14 títulos, todos ellos menores.
Nadal se ensañó ante su víctima favorita en los cuatro primeros juegos y dejó helados a un público francés que comenzó coreando "Richard, Richard" con la esperanza de ver un poco más de lucha, como presagiaba la revista del torneo con un titular que resultó nada premonitorio: "Va temblar la tierra".
El español se llevó un 4-0 sin ceder un solo punto. Se llegó a ponerse 5-0 en solo 18 minutos con un parcial de 20-2 puntos. Unas estadísticas que ponen la piel de gallina.
Pero el saque de Gasquet y algo de relajación del español llevó al tanteo hasta 5-3. No obstante, el número uno mundial consiguió cerrar la manga ante el gesto de alivio de su entrenador, Carles Moyà.
Los errores recurrentes en el revés del francés y el voraz juego del número uno del mundo, con letales subidas a la red, aceleraron el desenlace del partido.
Nadal, quien no cede un set en la arcilla francesa desde que perdió en unos cuartos ante Novak Djokovic en 2015, firmó ante Gasquet una victoria más convincente que ante el argentino Guido Pella, en segunda ronda, y que frente al italiano Simone Bolelli, en primera.
Ahora le espera Marterer, un jugador alemán de 22 años que viene de apear al estonio Jürgen Zopp (repescado como "lucky loser") y frente al que el español nunca jugó.