Reconoció que no hace pesas, que su físico se debe a la genética y al entrenamiento diario, mostrando su mentalidad en el trabajo
Adama Traoré, extremo español del Wolverhampton Wanderers, reconoció que no hace pesas, que su físico se debe a la genética y al entrenamiento diario, mostrando su mentalidad en el trabajo al afirmar que si un día es igual que el anterior, "es un día perdido".
Convertido con su debut con la selección española absoluta ante Portugal en la sensación del momento, Adama agradeció la confianza de técnicos y médicos que le han ayudado a lograrlo al tercer intento. Una lesión muscular y resto de covid-19 en la sangre lo impidieron en los dos primeros intentos.
"Mi mentalidad es mejorar día a día, si soy igual que ayer es un día perdido", aseguró como carta de presentación. "Detrás de mi físico hay trabajo preventivo y para mejorar, pesas no hago porque mi genética me hace ganar mucho volumen muy rápido, es la realidad. Trabajo fuera de los terrenos de juego para mejorar físicamente y competir", aclaró tras llamar la atención con su musculatura.
Adama es de los futbolistas más rápidos del momento. "Nunca me han hecho la prueba de los 100 metros pero me gustaría hacerla", reconoció. "Con el gps me dicen que corro a alta velocidad y les sorprende a los preparadores físicos la velocidad cuando compito dentro del terreno de juego. Es parte de mí y parte del juego que intento explotar".
Tras su esperado debut con la selección española, Adama cierra las puertas a las opciones de ir con Mali, que también le citó. Aseguró que en ningún momento fue un tema que tratase con Frederic Kanouté. "No hablé con él. Lo conocí cuando era muy pequeño, cuando fui a ver a los jugadores de Mali a una concentración y es una persona muy amable, pero no he hablado con él para el tema de la selección".
Robert Moreno primero y Luis Enrique después han llamado a Adama, conscientes de que es un futbolista diferente a lo que tienen y que amplía los registros de la selección española. A ambos les está agradecido el extremo nacido en Hospitalet de Llobregat.
"Tanto Robert Moreno como Luis Enrique han confiado en mí, estoy agradecido, y al médico. Hay que recordar que estuve mucho tiempo para lograr debutar y ha insistido en que venga para demostrar lo que tengo y dar mi granito de arena. Ha habido muchos problemas y ellos han insistido", dijo.
"El míster me pide que dé el máximo, que demuestre mis cualidades y plasme en el campo lo que busca tácticamente. Lo intento dar con mis cualidades, ayudar al máximo a la selección para ganar cualquier partido. Desde ahora cuando me necesite estaré al cien por cien en el campo", añadió.
Por último, no miró atrás ni lamentó no haber tenido la oportunidad de triunfar en el Barcelona como está haciendo su amigo Ansu Fati, con quien reconoció que habla del club.
"Hablamos de todo, temas más generalizados porque he estado muchos años en el club y él también. Nos conocimos en la cantera, comentamos cosas del equipo, las cosas que hemos pasado juntos en el Barça y nos conocemos bien. No es decisión mía si le vendría bien al Barça, mi mentalidad es trabajar día a día para ser mejor".