La Generalitat de Cataluña ha elevado a 13 el número de personas muertas, según ha confirmado el conseller de Interior del Govern catalán, Joaquim Forn.
Mientras, los heridos en el atentado perpetrado en La Rambla de Barcelona se elevan a 88, 15 de ellas graves, 23 menos graves, y 50 leves, de múltiples nacionalidades, según el último balance facilitado por el Departamento de Interior de la Generalitat..
Sobre las 17.00 horas, una furgoneta de color blanco que ha accedido a la Rambla desde la plaza Catalunya se ha subido a la acera a gran velocidad y ha embestido a los transeúntes que paseaban por esa vía, una de las arterias más concurridas de Barcelona, causando la muerte de 13 personas.
Los mossos d'Esquadra han confirmado que no se ha producido ningún atrincheramiento en ningún bar del centro de la ciudad, como en principio había trascendido.
El atropello masivo
Sobre las cinco de la tarde, una furgoneta de color blanco ha entrado, "haciendo eses", según un testigo de los hechos, en las Ramblas de Barcelona y ha atropellado a decenas de personas. "He visto salir volando a varias personas", ha añadido el testigo, un taxista de la capital catalana.
Esa furgoneta blanca, de la marca Fiat, ha sido interceptada, pero no así el conductor, quien supuestamente ha escapado y se ha parapetado en un bar del centro de la ciudad, provisto de un arma larga.
Dicha furgoneta es un vehículo de alquiler recogido en la localidad de Santa Perpetua de la Mogoda (Barcelona). Según han indicado fuentes policiales, la persona que podría haber alquilado el vehículo es un joven de origen magrebí de nombre Driss Oukabir, con documento de residencia en España y de quien la policía ha difundido una foto.
Pero las fuerzas de seguridad creen que una segunda persona puede estar implicada porque han localizado otra furgoneta en la localidad barcelonesa de Vic. En ese segundo vehículo, que no contiene explosivos y no representa ningún peligro, podría haber huido uno de esos dos autores.
Reunión de urgencia
La Generalitat, debido a la gravedad de los hechos, ha convocado de urgencia una reunión del Centro de Coordinación Operativa de Cataluña (CECAT) para hacer un seguimiento de las consecuencias del atentado, a la que asistirá el presidente catalán, Carles Puigdemont; la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; y el delegado del Gobierno en la comunidad, Enric Millo.
De hecho, el jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, al poco de conocer los hechos, ha iniciado contacto permanente con Puigdemont y ha suspendido los actos previstos mañana en Pontevedra.
No es la única línea abierta del presidente, ya que también mantiene conversaciones constantes con los líderes del PSOE, Podemos y Ciudadanos, Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Albert Rivera, respectivamente.
Millo, el delegado del Gobierno en Cataluña, también está informando puntualmente al jefe del Ejecutivo.
Por otro lado, fuentes socialistas han señalado que el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, está en contacto con Margarita Robles, portavoz del PSOE en el Congreso de los Diputados.
Asimismo, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, viaja en estos momentos a Barcelona para seguir de cerca todos los detalles en torno al atentado.
Fuentes del Ejecutivo han informado a Efe de que, a su llegada a la Ciudad Condal, Sáenz de Santamaría se trasladará a la Delegación del Gobierno en Cataluña para reunirse con su máximo responsable, Enric Millo, así como con otros miembros de su equipo que están coordinando las actuaciones tras ese ataque.
La Audiencia Nacional abrirá hoy mismo diligencias para investigar el atentado.
Tanto la Policía Nacional como los Mossos d'Esquadra han activado un dispositivo para buscar al autor del atropello masivo, de origen magrebí, así como a la atención a las víctimas.
Emergències de Catalunya ha facilitado el teléfono +34 93 214 21 24 para quien necesite información sobre el atentado ocurrido en la Rambla de Barcelona, informa la Generalitat.