La junta directiva de la Federación Local de Asociaciones de Vecinos (Flave) ‘Sol y Mar’ ha celebrado un encuentro, enmarcado en las visitas a las distintas asociaciones de vecinos de la ciudad, con parte de la junta directiva de la entidad Barrio Alto y Centro Histórico Portuenses, con su presidenta al frente, Inmaculada Alcántara, así como con el portavoz de Unión Portuense, Javier Botella.
La presidenta de la Federación, Milagros Muñoz, agradece este tipo de encuentros, puesto que asociaciones de vecinos y representantes políticos aportan la visión de la realidad actual de la ciudad y del movimiento vecinal.
La Federación ha comprobado el deterioro que sufre el local, un problema que arrastra desde hace casi tres años, y que ha provocado que se estén dejando de realizar actividades. Un problema que radica en la peligrosidad de un techo totalmente caído debido a la rotura del bajante comunitario, y la gotera producida en consecuencia, que se unen a los malos olores que desprenden, al tratarse de aguas fecales.
Una situación que deriva de la falta de actuación del anterior equipo de Gobierno, que desatendió el problema de esta asociación de vecinos, y que se ha agravado con el tiempo y la inacción del actual Gobierno local. Lejos de afectar solo al local, este problema ha provocado daños en el material informático y el mobiliario de la asociación. Además, se han producido numerosas inundaciones como consecuencia.
Entre otras cuestiones, se trató el asunto de la importancia que tiene la aprobación de una vez del Peprichye para el centro histórico y la ciudad en general; crear zonas de esparcimiento y ocio para mayores y pequeños o parques; incentivar la repoblación del centro, puesto que la población actual es muy mayor; potenciar el comercio local o el deficiente servicio de limpieza.
Por su parte, el portavoz de Unión Portuense se ha mostrado dispuesto a ayudar en la medida que le permite tener un solo representante en la Corporación municipal.
La Federación continuará denunciando, junto a las asociaciones de vecinos, los problemas existentes en los barrios portuenses, por lo que confía en que las juntas directivas, así como los vecinos en general, sigan trasladando a la Federación todas las necesidades existentes.
