El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha trasmitido a las víctimas de ETA que, "por la gravedad e intensidad de los daños humanos irreparables producidos", su "violencia" requiere de "una valoración expresa del daño injusto causado, y ha pedido a la banda "una lectura autocrítica sobre lo que hicieron". "Decir fue injusto significa también rechazar su enaltecimiento, legitimación o justificación", ha añadido.
Además, ha advertido, en el caso de las víctimas de los GAL y el Batallón Vasco Español, de que "la impunidad no puede ser la última palabra", y ha recordado que "el Estado tiene una responsabilidad ante ellas".
Urkullu ha presidido este sábado, en la Plaza Indautxu de Bilbao, el acto de solidaridad con las víctimas del Terrorismo que, bajo el lema "Fue Injusto. Gizartea eta biktimak, elkarrekin oraina eta etorkizuna eraikiz' (Sociedad y víctimas, construyendo juntas el presente y el futuro)', ha sido convocado por el Gobierno Vasco con motivo del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo.
Alrededor de 300 personas, entre ellos el Gobierno vasco al completo, los tres diputados generales vascos, alcaldes y parlamentarios, así como medio centenar de víctimas de ETA, el GAL o el Batallón Vasco Español, han permanecido en círculo por espacio de media hora.
En el homenaje han participado representantes de todos los partidos políticos vascos a excepción de la izquierda abertzale. Sí ha acudido una representación de EA, integrada en la coalición EH Bildu, encabezada por su secretario general, Pello Urizar.
El lehendakari, que ha insistido en numerosas ocasiones en enfatizar el lema "fue injusto" que ha presidido el acto, ha dicho desconocer "si alguna vez ETA y el resto de organizaciones terroristas llegará a hacer una lectura autocrítica sobre lo que hicieron".
"No sabemos si serán capaces de expresar algo que repare el daño que causaron a las víctimas y a la sociedad. Sabemos que deberían hacerlo. La sociedad y las instituciones vascas y sus representantes sí podemos", ha señalado.