El próximo martes, 1 de marzo, arranca el proceso de escolarización para el curso 2022/23. Las familias onubenses tendrán un mes para decidir el centro en el que quieren matricular a sus niños pero no podrán incluir en sus solicitudes el nuevo colegio del Ensanche Sur, cuya apertura, inicialmente prevista para el próximo curso, se llevará finalmente a cabo en el año académico 2023-24.
Según ha confirmado a Viva Huelva la Delegada de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, Estela Villalba, la decisión se ha tomado tras comprobar que el retraso que acumulan las obras no podría solventarse a tiempo. “Hemos apurado casi hasta el final pero finalmente creemos que lo mejor es abrir al año siguiente con todas las garantías”, indica Villalba.
La delegada explica que la constructora se ha ido topando con inconvenientes que han retrasado el plazo de entrega, previsto para septiembre. Así, en primer lugar han tenido que “duplicar la profundidad de la cimentación del edificio” para adaptarse al terreno de la zona. La crisis global en los suministros de materiales también ha influido en el retraso y sigue siendo una amenaza que podría provocar nuevos imprevistos, demorando aún más la finalización del edificio.
En principio, indica Villalba, las obras estarán finalizadas en el próximo diciembre, por lo que habrá tiempo de sobra para acondicionar el colegio con tranquilidad de manera que pueda abrir sus puertas con todo a punto en el curso 2023-2024.
Mientras, la comunidad educativa onubense se prepara para un proceso de escolarización en el que no hay cambios en cuanto a baremación o áreas de influencia pero que mantiene incógnitas sobre la oferta de plazas.
La delegada indica que a pesar de la tendencia al descenso de nuevas matriculaciones por la bajada de la natalidad de los últimos años el próximo curso habrá “más alumnos que el año pasado”. Villalba no ha concretado aún el número de unidades y plazas para el próximo curso pero aclara que se abrirán “todas las necesarias” para cubrir la demanda.
En este sentido, Villalba advierte que el hecho de que la oferta inicial de unidades con las que arranque el proceso el día 1 sea menor a la que existe este curso “no quiere decir que habrá recortes” porque se autorizarán las unidades necesarias en función de la demanda.
Como ejemplo, Villalba pone un hipotético pueblo con dos colegios en el que los datos demográficos muestran que habrá 60 solicitudes para Infantil de tres años. Ese número, indica, se traduciría en tres unidades pero, en principio, se ofertaría “solo una en cada centro para abrir la tercera en el colegio donde exista una demanda mayor de las familias”.
“Nuestro objetivo es que las familias puedan llevar a sus hijos al centro de su preferencia”, explica.
Sin embargo, el hecho de que la Junta no haya comunicado aún la previsión de solicitudes y la oferta de plazas para el próximo curso ha creado malestar entre los sindicatos docentes. Según ha podido saber Viva Huelva, los representantes sindicales se reunieron esta semana con el responsable de Planificación, quien no les informó sobre la demanda prevista y la oferta alegando que los datos que manejan aún son provisionales.
En este escenario de incertidumbre, la Junta de Personal Docente ha decidido convocar una concentración a las puertas de la Delegación de Educación el próximo martes, coincidiendo con el inicio del proceso de escolarización. Según indica la presidenta de la Junta de Personal, Isabel López, la concentración se llevará a cabo “en apoyo a la matriculación en la escuela pública, como reivindicación par que no se pierdan unidades ni centros”.
López añade que su temor es que “la bajada de natalidad se traduzca en supresión de aulas”. Si existe menor demanda de plazas, afirma, “es el momento ideal para una bajada de ratio”, que repercutiría no solo en la calidad de la enseñanza sino en la mejora de las condiciones laborales de los docentes.
Ante el temor de los sindicatos, Estela Villalba remarca que “nunca la escuela pública ha tenido tantos recursos como ahora” porque a pesar de que en los últimos tres años se han perdido alumnos por la bajada de la natalidad han aumentado “las unidades y los docentes” y la inversión por estudiante supera ya la cifra de 4.000 euros.
Eso sí, advierte la delegada, “el sistema tiene que dar respuesta a las necesidades de los ciudadanos y los recursos no son infinitos”. Por ello, aclara, habrá que primar el dar respuesta al aumento del 70% de la demanda de ciclos formativos antes que mantener, por ejemplo, unidades en Infantil con solo diez alumnos. “Es verdad que la demanda baja en Infantil y Primaria pero aumenta en formación profesional y los recursos tienen que estar donde están las necesidades”, asevera Villalba.