Con Chuli todo es posible. El Recreativo se reencontró con el triunfo en su propio estadio después de tres meses de continuos titubeos, gracias a una actuación espectacular del canterano onubense, que hizo un doblete y volvió a demostrar que es la pieza clave del engranaje táctico de Sergi Barjuan. No habrá proyecto a corto plazo a Primera división si el abanderado recreativista abandonara la nave. Los números de Chuli son asombrosos, con once tantos en 22 jornadas y es uno de los máximos goleadores de la categoría. Tiene instinto deprerador en los últimos metros.
En los primeros minutos de partido ninguno de los dos equipos fueron capaces de crear ocasiones claras de gol. La lluvia atrajo a escasos seguidores al Nuevo Colombino, pero los que asistieron si fueron más ruidosos que en anteriores encuentros debido a la disputa de un derbi regional. En el minuto 20, Morcillo lanzó un libre directo que acabó en corner y, poco después, Dimas cabeceó alto. Los albiazules comenzaron a pisar área rival. Los xerecistas se acercaron con poco peligro a terreno onubense, solo Bruno estuvo a punto de rematar un pase de Tato. Sin embargo, ya iba a empezar el ‘show de Chuli’.
Doblete del onubense
En el 32’, una rápida combinación albiazul, el canterano aprovechó la indecisión de los defensores visitantes Redondo y Mendoza para colarse entre ambos, controlar el esférico y batir de vaselina a Raúl Navas. Este gol significaba que Chuli llevaba hasta cuatro jornadas consecutivas marcando. Ocho minutos después, Jonathan Valle ejerciendo de ‘falso 9’ vio el desmarque de Chuli y dio un pase interior sin peligro y con ventaja a los centrales xerecistas, el pichichi del Decano volvió a ganarles las espaldas y metió la bota para enviar el balón al palo contrario donde no pudo llegar el meta Raúl Navas.
Dos tantos sacados de la chistera. El Recre tampoco hizo demasiados méritos para ir por delante en el marcador, pero la inspiración del delantero onubense marcaba las diferencias.
Control y contragolpes
Al inicio de la segunda parte, Chuli pudo firmar el ‘hat-trick’, pero erró en el disparo tras un sensacional pase de Matamala. Los onubenses controlaron la zona ancha del campo y solo el Xerez podía meterse en el choque por una jugada aislada o por juego de bandas. Así, Esteban Vigo introdujo a los extremos Maldonado e Israel y como referencia a un José Mari aún no recuperado de sus dolencias musculares. Pero había que ir a por el partido y en esa búsqueda de la reacción de los visitantes demostraron sus carencias: incapaces de competir y falta de agresividad en el juego. Dispararon una vez a Cabrero y poseen síntomas de equipo candidato al descenso.
Por el contrario, Valle estrelló un balón en el lateral de la red y Berrocal olió su tanto. En definitiva, gran Chuli y bonitos son sus goles.