El juicio fijado para mañana por desahucio contra Rocío Medel, la madre soltera de Huelva que a principios de noviembre ocupó una vivienda propiedad de una mujer que vive en una residencia de ancianos cuyo patrimonio gestionan unas monjas que le han reclamado que se marche, ha quedado aplazado.
En declaraciones a Efe, la propia Medel ha explicado que el motivo es que su abogada que no puede comparecer en la vista, que iba a celebrarse en el Juzgado de lo Penal 1 de Huelva, "porque ha tenido un accidente".
Ahora está a la espera de que se fije de nuevo fecha para el juicio, si bien ha reconocido, que "le alivia el aplazamiento porque eso le da un poco más de tiempo y le permite permanecer en la vivienda -en la que reside con sus hijos de 9 y 2 años-".
El juicio es consecuencia de la denuncia que la propietaria de la casa, según las monjas, ha interpuesto después de enterarse de la ocupación de la misma,
Medel ha indicado que desde que la noticia saltara a los medios de comunicación, hace dos semanas, ha ido a la residencia a hablar con las monjas y "no me han recibido".
"Sí que han hablado por teléfono con una representante de la Plataforma Stop Desahucios y, al parecer, le han dicho que me quieren ayudar, pero esa ayuda no llegan y conmigo no hablan", ha indicado esta mujer que lo único que pide es la posibilidad de que se le brinde una vivienda por un alquiler social cuyas posibilidades le permitan pagar.
Por su parte, las monjas, según explicó a Efe una portavoz de la residencia, ya han ofrecido a esta mujer un alquiler social para que se mantenga en el piso, "porque la dueña es una mujer que tiene problemas de movilidad y no puede vivir en él".
Además, indicó que es una historia "que las monjas viven con mucha pena", ya que han ayudado a esa mujer en varias ocasiones, y que tuvieron conocimiento de la historia cuando la encargada de la limpieza del piso les dijo que estaba ocupado por alguien que no era familiar de la propietaria.