El Ayuntamiento de Huelva ha renovado esta mañana su compromiso con Aonujer, la Asociación Onubense de Jugadores de Azar en Rehabilitación con la que colabora desde su creación en 1991. Coincidiendo con las celebraciones organizadas por Aonujer para conmemorar el Día Sin Juegos de Azar, establecido el 29 de octubre, el alcalde de Huelva Pedro Rodríguez y Jorge Barroso, en representación de Aonujer, ratifican un convenio de colaboración, que supone una subvención de 3.600 euros destinados a colaborar en el desarrollo de sus trabajos de integración, rehabilitación y asistencia a personas con problemas de ludopatía.
Además, el Ayuntamiento de Huelva, a través de la Concejalía de Servicios Sociales y Juventud, colabora de manera periódica con Aonujer en la organización de actividades, especialmente dirigidas a los jóvenes, durante todo el año
Desde principios del mes de octubre, Aonujer viene organizando actos por toda la provincia para conmemorar el Día Sin Juegos de Azar. Las actividades para la capital arrancan precisamente hoy con un taller sobre ‘Ludopatías’, a cargo de la psicóloga de Aonujer, Lola Gómez Noguera en el que participan 90 alumnos del primer curso de Secundaria del IES Pablo Neruda. El taller organizado en el edificio Gota de Leche, arranca con el visionado de un vídeo editado por FEJAR, la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados, que muestra la experiencia de una adolescente de 16 años con la aplicación del móvil más popular actualmente, whats-App. La historia narra cómo lo que al principio era una herramienta para facilitar la socialización y el contacto con los demás se acaba convirtiendo en todo lo contrario, ya que el mal uso de esta aplicación provoca que la chica tenga problemas con su grupo de iguales, su familia y su desempeño escolar. Tras ver el vídeo, los jóvenes han tenido la oportunidad de analizar su propia experiencia con el whats-app y las Nuevas Tecnologías en general, con una puesta en común dirigida por la psicóloga para terminar con un glosario de pautas para fomentar el uso adecuado de este tipo de herramientas.
Para el propio día 29 está prevista la instalación de mesas informativas en La Palmera y el Mercado del Carmen de 10 a 13. Además, a las 19.00 horas, está prevista una charla, abierta al público en general y totalmente gratuita en el edificio ‘Gota de Leche’ sobre Juego Patológico y Nuevas adicciones. Se trata de un seminario de dos horas de duración, para dar a conocer los aspectos básicos y clínicos del juego patológico, ofreciéndoles además una bibliografía de referencia donde poder ampliar los diferentes tipos de jugadores y sus características, las teorías y modelos existentes sobre el tema, los factores que predisponen a un jugador para convertirse en ludópata, así como los riesgos a evitar y las medidas a adoptar para protegerse de ellos. Además, se insistirá en el riesgo de los denominados juegos ‘on line’ que sin necesidad de presencia física, implican los mismos riesgos que los juegos tradicionales.
Para finalizar, Aonujer ofrecerá unas jornadas de puertas abiertas en su sede de la Avenida Cristóbal Colón número 91.
De esta forma, en colaboración con el Ayuntamiento de Huelva, el Día Sin Juegos de Azar en la ciudad se aprovecha para trabajar en la prevención, ya que se cree que el 6,2% de la población puede sufrir algún trastorno relacionado con la ludopatía, por lo que en la provincia de Huelva se estima que 20.000 personas pueden estar atravesando este problema.
En este sentido, la prevención se refuerza en los jóvenes, para advertirles de los peligros del juego patológico relacionado con las nuevas tecnologías.
El objetivo principal de Aonujer es el tratamiento a personas afectadas por esta enfermedad, pero además trabajan en la prevención, apostando por la información y la formación. Actualmente, la asociación cuenta con 250 socios en la capital y 8 grupos de terapia. En estos años, más de 5.000 onubenses han conseguido escapar de la ludopatía. Un tratamiento centrado en la ayuda mutua y las terapias de autoayuda puesto en marcha por un equipo formado por psicólogos, trabajadores sociales, médicos, abogados y más de una veintena de monitores voluntarios formados por la propia asociación que trabajan de manera altruista para liberar a compañeros del horror en el que un día se vieron atrapados.