Las pulseras de color morado y serigrafiadas con el lema 'Jaén: Catedral para la Humanidad' se están convirtiendo en un complemento más para hombres, mujeres y niños de la capital. Quienes las llevan están demostrando su interés por el templo catedralicio, ya que la venta ha sido impulsada por la Asociación Círculo Ánimas de Jaén y respaldada por numerosos comercios, instituciones y particulares.
El único fin es recaudar dinero para limpiar la fachada del templo y sus torres. Será una huella ciudadana en pro de la mejora de las condiciones del templo renacentista.
Según el presidente de Círculo Ánimas, Francisco Carrillo, “la acogida está siendo muy buena”. Se han vendido en torno al 40% de las 10.000 pulseras ya ubicadas en comercios y organizaciones que las están vendiendo. “Los comercios jienenses se están portando muy bien, sin embargo no está funcionando en hostelería, donde se muestran reacios. Estamos seguros de que si se ofrece una pulsera, por un euro, la gente la compra”, valora Carrillo.
La intención es que los jienenses sientan suya la iniciativa y se involucren. Lucir en la muñeca la pulsera puede sugerir la compra de ésta a otros, llegando cada día a más personas. “Estamos contentos porque se están viendo muchas personas que llevan la pulsera”, reconoce el presidente.
Quienes la han comprado la lucen con orgullo y la tarea ahora es contagiar a todos para que en lugar de 10.000 se puedan encargar más pulseras y recaudar el máximo dinero posible.
Ejemplos de organizaciones y establecimientos que han hecho suya la campaña son el mercado de San Francisco, que se ha llevado 1.000 pulseras para los puestos; el Patronato de Cultura con 2.500 y de éstas 400 para Iuventa; y cofradías como la de Nuestro Padre Jesús, que se llevó 800 y ya ha vendido más de 500.
Por el momento la Asociación ha recaudado algo más de dos mil euros y hasta que no recaude el 50% de las ventas no encargarán el proyecto de limpieza.
Con el inicio del curso escolar la campaña llegará a los colegios de la capital, donde se buscará la complicidad de la comunidad educativa, desde el pequeño alumno y hasta el veterano director del centro de enseñanza. Además, en los próximos días saldrán a la calle, con un expositor, para seguir vendiéndolas.
