“La implicación y la proximidad con el territorio es lo que permite a la Caja Rural de Jaén contribuir al desarrollo económico de la provincia”. Enrique Acisclo, director general de la Caja Rural de Jaén, reflexionó ayer en voz alta sobre el pasado, presente y futuro de la principal entidad financiera de la provincia. Lo hizo en una conferencia ofrecida en la Real Sociedad Económica de Amigos del País con el sugerente título de “Caja Rural de Jaén, banca resiliente”, toda una declaración de intenciones de lo que, a su juicio, ha sido la trayectoria de una entidad que ha sabido superar y adaptarse a todas las convulsiones y situaciones adversas desde su fundación, allá por mediados del siglo pasado. Crisis como la de Uteco, en los años 80, que removió los cimientos de la Caja, pero que también logró superar. Así hasta el momento actual, en el que la Caja Rural exhibe un músculo atípico en el panorama financiero nacional. “Quizá lo que más nos diferencia es que actuamos como cooperativa de crédito, más que como un banco”, indicó Acisclo, que fue presentado por el director de La Económica , Antonio Martín Mesa. Y, a partir de ahí, otra seña de identidad de la Caja jienense es, precisamente, su proximidad. “Nuestra forma de actuar y nuestro compromiso con la sociedad jienense es también diferente, precisamente por esa proximidad con el territorio”, precisó el director general de la Caja Rural, que lleva más de tres décadas en el cargo. Además, Acisclo resaltó la implicación de la Fundación de la Caja Rural en todos los aspectos sociales y culturales de la provincia. Con relación al futuro más inmediato, Enrique Acisclo admitió que han de moverse en un “entorno regulatorio cada vez más exigente”, lo que les obliga, dijo, a “adaptarse” a todos los cambios en el mercado financiero, entre ellos los derivados de la revolución digital. “Aparecen nuevas plataformas financieras que nos hacen competencia frente a los que nos movemos en los mercados regulados”, añadió. De igual modo, señaló que frente a la tendencia hacia los oligopolios financieros , la Caja Rural mantendrá su filosofía actual, marcada por la proximidad con sus clientes. En definitiva, una Caja, dijo Acisclo, que “probablemente habría que inventarla si no estuviera” por su contribución a la economía jienense.