Las lluvias que se vienen registrando prácticamente desde principios de marzo y la huelga del sector del transporte por mercancías parecen haberse aliado contra algunas de las obras que se ejecutan en el centro histórico, donde en las dos últimas semanas apenas se aprecian avances significativos.

La cuestión cobra especial relevancia si se tiene en cuenta la proximidad de la Semana Santa y los enclaves en los que se desarrollan esas actuaciones: el denominado eje del Arroyo y el entorno de la iglesia de San Juan de los Caballeros.  

El teniente de alcaldesa de Urbanismo, Infraestructura y Medio Ambiente, José Antonio Díaz, resta importancia a estos hechos, pero lo cierto es que en el seno de las cofradías del entorno de San Juan de los Caballeros existe cierta inquietud y ya se preparan incluso alternativas ante la posibilidad de que el tramo de la calle San Juan comprendido entre la calle Palma y la plaza de Melgarejo no pueda utilizarse.

Díaz da por hecho de que el tramo completo de la calle San Juan que está levantado no estará finalizado antes de Semana Santa, pero entiende que será posible hormigonarlo para que pueda utilizarse, cumpliéndose así el compromiso que se había adquirido con El Amor y La Vera Cruz, que son las dos cofradías afectadas por esta actuación municipal.  

Distinto es el caso de las obras del eje del Arroyo, cuyo desarrollo afecta a todas las cofradías.

El presidente del Consejo local de la Unión de Hermandades, José Manuel García, admite que las obras están “totalmente paralizadas” por la huelga del transporte, pero entiende que el retraso que se ha acumulado en estas últimas semanas puede incluso “beneficiar” a las cofradías, toda vez que la empresa adjudicataria de los trabajos no va a intervenir en José Luis Díez hasta una vez concluida la Semana Santa.  

Eso significa que este vial se podrá utilizar en su totalidad y no únicamente en el pasillo que se iba a habilitar para el paso de las cofradías.

Tampoco será necesario impedir el acceso al público en general, que era lo que se había previsto.

De hecho, el Consejo local de la Unión de Hermandades ha tratado hasta el último momento de que se pudiera instalar la tribuna de palcos en esta zona de la Carrera Oficial, lo que hubiera evitado el traslado de sus 80 abonados.  

Solventada la cuestión de José Luis Díez, el problema se encuentra ahora en la propia plaza del Arroyo.

En este caso en concreto, todavía hay margen de tiempo para habilitar un pasillo de salida desde la calle Cruces hasta el lateral más próximo a la antigua Comisaría, que es el vial que actualmente se encuentra abierto al tráfico. Esa zona sí estaría abierta al público en general.  

Las alternativas de Amor y Vera Cruz

El hermano mayor de la Hermandad de la Vera Cruz, Manuel Báez, confía en que en estas dos semanas que restan para el Domingo de Ramos la empresa que acomete la segunda fase de la reurbanización del entorno de San Juan de los Caballeros pueda al menos hormigonar “el trocito lateral” de la plaza Melgarejo, ya que apenas estamos hablando de “unos siete u ocho metros”.

En el supuesto de que la cofradía no pudiera salir hacia la derecha -como es tradicional- tendría que hacerlo buscando el pasaje de la Santa Cruz.

“Afortunadamente se hizo esa obra y podríamos rodear la iglesia, que es lo que tenemos previsto para la recogida”, explica Manuel Báez.  

El cortejo de la Hermandad del Amor se organiza en el cercano convento de Santa María de Gracia y toma por el tramo de San Juan que ahora se encuentra en obras.

Conscientes de que será imposible completar ese recorrido, la cofradía ya tiene claro que sus nazarenos tomaría por la calle Canto en busca de Siete Revueltas y pasaje de la Santa Cruz.

“Los obreros nos dicen que va a ser muy difícil, por no decir imposible, terminar ese tramo por la escasez de material y por la lluvia, así que hemos preparado esta alternativa”, avanza Juan Luis León, hermano mayor de la Hermandad del Cristo del Amor.  

Al margen de todo ello, el Ayuntamiento ya está preparado para acometer tareas de limpieza y retirada de vallas en los días previos al inicio de la Semana Santa.