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Crece la inquietud ante la “previsible causa de disolución automática” de Comujesa

La Confluencia se suma a las dudas del PSOE y también reclama la convocatoria urgente del consejo de administración de la sociedad municipal

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  • Kika González y Raúl Ruiz Berdejo -

La Confluencia (Ganemos e IU) se ha sumado a las dudas ya mostradas estos últimos días por el PSOE acerca de la viabilidad de la empresa municipal Comujesa, de quien dependen alrededor de 1.200 trabajadores y la prestación de servicios básicos como el transporte urbano o la ayuda a domicilio, entre otros.

Tanto es así que ambas formaciones han hecho público un comunicado conjunto en el que exigen la convocatoria urgente de un consejo de administración que entre otras cosas aborde “la previsible causa de disolución automática” de esta sociedad municipal.

Tanto PSOE como La Confluencia quieren que la alcaldesa y presidenta de Comujesa, María José García-Pelayo, y la propia gerencia ofrezcan explicaciones de la situación económica en la que se encuentra la empresa.

Para ello, reclaman informes detallados sobre las facturas pendientes de pago, la deuda financiera contraída por la sociedad con el Ayuntamiento, la previsión del cierre del ejercicio 2023, las posibles causas de desviación presupuestaria y las “posibles” medidas y soluciones que pueden adoptarse en este escenario.

La solicitud de esta convocatoria se ampara en los estatutos de la sociedad, que es al que recurren los consejeros del PSOE (José Antonio Díaz y Carmen Collado) y de La Confluencia (Raúl Ruiz-Berdejo) para acceder a esta información. Sin embargo, fuentes municipales advierten de que para solicitar esa convocatoria se precisa la firma de hasta cinco consejeros, y no solo de tres, como es el caso. 

Como ya avanzó este medio, la deuda a proveedores de la empresa municipal Comujesa se incrementó el pasado mes de octubre en 447.174 euros, lo que supone un repunte superior al 27 por ciento, según los datos divulgados por el propio Ayuntamiento de Jerez.

De este modo, la sociedad adeuda 2.057.903 a sus proveedores, elevando a 99,94 días su periodo medio de pago.

La situación es especialmente preocupante si se tiene en cuenta que la empresa municipal podría entrar en causa de disolución al cierre del presente ejercicio si no se adoptan soluciones de urgencia en estas próximas semanas, ya que desde la oposición se estima que las pérdidas se situarían en el entorno de los 1,5 millones de euros.

Esta situación no es nueva, ya que en ejercicios anteriores el Ayuntamiento ha debido dotar de crédito presupuestario a la sociedad municipal precisamente para evitar su quiebra técnica.

El problema es que en este caso en concreto ya no es posible acudir a la vía del Fondo de Contingencia dado que se ha empleado para garantizar el pago de las nóminas del personal, que ha experimentado un sensible aumento en estos últimos meses como consecuencia del mayor gasto en productividades y gratificaciones.

El portavoz del grupo municipal socialista, José Antonio Díaz, ya mostró su temor ante la posibilidad de que el Gobierno local esté “dejando morir” a Comujesa con el objetivo de disolverla y “después externalizar los servicios a una empresa privada”, una estrategia que enmarca en un “plan oculto” y que a su juicio justificaría que en apenas un mes la deuda a proveedores se haya incrementado en un 27 por ciento.

Ahora, el portavoz de La Confluencia, Raúl Ruiz-Berdejo, advierte de que "la gestión económica del Gobierno del PP" aboca a la ciudad "al caos más absoluto", entre otras cosas porque "la mayor empresa pública" está "multiplicando su deuda exponencialmente" y está en riesgo de "entrar en causa de disolución". "O se le inyecta crédito de manera urgente o tendremos un problema muy serio. Lo que ocurre es que el presupuesto municipal tiene escasísimo margen", subraya. 

Para Ruiz-Berdejo, "resulta triste comprobar cómo en solo unos meses se dinamita la estabilidad lograda con tanto trabajo". "En ocho años, los trabajadores y las trabajadoras del Ayuntamiento de Jerez y sus empresas jamás vieron peligrar su nómina, como ocurrió hasta que desalojamos a Pelayo. Ha vuelto y en solo seis meses vuelve a ocurrir lo mismo. Es el problema que nos trae la falta de memoria, que en unos meses se puede retroceder más de diez años", concluye. 

 

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