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Inmolación en Chapín

Galán marca en propia puerta en el minuto 94, el Xerez tiene más actitud pero es incapaz de meter un gol

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Xerez    0
Sabadell    1


Xerez: Navas, Raúl Cámara, Galán, Iago Bouzón, Redondo; Rafa García (Bruno Herrero, minuto 76); Maldonado, Lucas Porcar, Rueda (Adrián Ruiz, minuto 82), Marquitos (José Vega, minuto 70); Patiño 
Sabadell: Nauzet; Óscar Ramírez, Raúl Goni, Abraham Paz, Samu; Juvenal, Moha (Fernando Llorente, minuto 89), Antonio Hidalgo; Eneko, Lanzarote (Collantes, minuto 94) y Aníbal (Uli Dávila, minuto 67)

Goles:  0-1    m. 94: Galán en propia puerta. Batió a Navas de espuela cuando intentaba despejar
Árbitro: Arias López, de Cantabria. Amonestó al local Rueda y a los visitantes Samu, Eneko y Juvenal, a éste en dos ocasiones por lo que fue expulsado en el minuto 61
Incidencias: Partido de la vigésimo séptima jornada de Liga en Segunda División, disputado en el estadio Chapín ante 4.763 espectadores

Inmolación, morir en el intento, desahucio, pónganle el calificativo que quieran a la derrota del Xerez, pero es que lo de este equipo es de gafe total y absoluto. El Sabadell se llevó los tres puntos de Chapín sin disparar ni una sola vez a puerta. Un error en el último segundo de Galán, que quiso despejar y batió a su portero, le bastó a los arlqeuinados para llevarse el triunfo. Tan cierto como que la permanencia a falta de quince jornadas para finalizar la competición se comienza a ver en chino. No sé si el problema del Xerez ha sido mantener tanto tiempo en el banquillo a Esteban Vigo. No sé si ha sido esa plaga de lesiones que no cesa, pero lo que sí comienzo a creer es que a este Xerez ha llegado el conjuro de todas las meigas gallegas, que existir dicen que existen, para amargarle la temporada y hundirlo, si Ríos y los suyos no lo remedian en un final épico, en la miseria de la Segunda División B o en algo peor.

El equipo con Carlos Ríos de estreno en el banco tenía una actitud diferente. Ya no quemaba el balón en las botas como quemaba en anteriores jornadas, ya los jugadores no se escondían tanto y se ofrecían más, aunque hay futbolistas que no terminan de romper y otros de los que hay que esperar más, por aquello de haber llegado con la vitola de refuerzo, como es el caso de Patiño. Había ganas e interés, se soltaba la pierna a la hora de disparar desde fuera del área, casos de Lucas Porcar o Rueda, aunque no es menos cierto que el equipo cuando llegaba al borde del área contraria no encontraba las soluciones y uno se acordaba de José Mari, de Vélez o de esos delanteros como Pineda, Calle, Bermejo, Yordi o el propio Antoñito que tantos goles y tantos triunfos dieron.  El Xerez lleva 565 minutos sin hacer un gol, suma cinco puntos de cuarenta y cinco posibles, ya  alcanza quince jornadas sin ganar y así es imposible. Si además de todo eso la mala fortuna es una aliada cierta pues habrá que apagar, aunque Ríos intentará solventar el entuerto y como aún hay tiempo habrá que buscar a ese hombre que sea capaz de marcar un gol en la portería contraria. Es a lo último que queda por encomendarse. Amén. 

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