La Universidad de Cádiz (UCA), el Consejo Regulador del Vino y la Fundación del Patrimonio Industrial de Andalucía (Fupia) firmaron ayer un convenio de colaboración que tiene como principal objetivo impulsar actividades divulgativas, formativas, de catalogación, de edición y fomento del turismo industrial relacionado con el patrimonio vitivinícola tangible e intangible del Marco de Jerez.
Se trata de incorporar un nuevo concepto al turismo enológico, por cuanto se trata también de poner en valor la maquinaria y los elementos que han permitido a lo largo de los siglos la elaboración de los caldos jerezanos.
La propia presidenta de la Fundación del Patrimonio Industrial de Andalucía, Inés Durán, justificó esta iniciativa en el deseo de un sector de enoturistas intersado en conocer el desarrollo de la industria bodeguera a lo largo de los siglos.
El rector de la UCA, Eduardo González Mazo, explicó que con este convenio se trata de “sumar sinergias para profundizar en el conocimiento de un sector clave” para la ciudad de Jerez y su entorno. “El conocimiento, el estudio y la investigación son siempre importantes aliados para poner en valor lo que somos, lo que tenemos y lo que ofrecemos al mundo”, añadió.
A partir de ahora, el Consejo Regulador, la UCA y Fupia se dan la mano para tratar de “ahondar en el inventariado, catalogación y análisis histórico de un inmenso patrimonio relacionado, por ejemplo, con los aperos vitivinícolas”.
El presidente del Consejo, Beltrán Domecq, expresó su satisfacción tras la firma del convenio, así como su deseo de que el sector ponga las herramientas necesarias “para llevarlo a buen puerto”. Ya en septiembre se celebrarán unas primeras jornadas sobre esta temática.