Cuando el cuarto autobús está prácticamente lleno, desde las 18 horas de este miércoles se están vendiendo en la tienda oficial del Xerez Club Deportivo las entradas para el encuentro del domingo en Lora, el partido que debe llevar al equipo xerecista a Tercera División por la puerta grande. El precio de las entradas finalmente será de 5 euros, tras las negociaciones que han existido entre la directiva loreña y los miembros de la Asociación Aficionados Xerecistas XCD. Este jueves y el viernes se seguirán vendiendo las entradas en la tienda del club y en el mismo horario de 18 a 21 horas, mientras que el sábado también habrá venta de localidades de 10.30 a 13.30 horas.
La salida de los autocares está prevista para las 8.45 horas desde Chapín y el equipo partirá entre un cuarto y media hora antes con la intención de alcanzar los vestuarios del Municipal Virgen de Setefilla a las 10.3o, una hora y media antes de que arranque el choque más decisivo e importante de toda la temporada.
Se estima que finalmente serán entre trescientos cincuenta y cuatrocientos los aficionados xerecistas que se harán presentes en la localidad sevillana para vivir lo que ya se está denominando la “fiesta del ascenso”. Sin género de dudas la directiva del Lora va a hacer caja en este choque último de una campaña que ha sido realmente mala para las ilusiones de un equipo que perdió la categoría el pasado domingo, en el Felipe del Valle de San José de La Rinconada, al perder por 4-0.
En la plantilla, por otra parte, todos son ánimos para solventar la contienda, ya que, aunque con un punto bastaría para lograr dar el salto de categoría, se quiere ganar el partido y terminar la campaña con otro triunfo, que sería en esta oportunidad el séptimo consecutivo. Un final de campaña, por cierto, solo comparable a aquella, con Carlos Orúe en el banquillo, en la que se consiguió el ascenso a Segunda División venciendo en el último partido ante la Gramanet. El equipo xerecista, tras perder ante el Recreativo de Huelva, parecía desahuciado para el ascenso y ganando jornada tras jornada, domingo tras domingo, no solo se colocó en la zona de promoción como segundo, sino que incluso el sobró el partido final de temporada. Esta campaña, salvando la distancia de categoría, tiene mucha similitud con aquella de la temporada 1996/97. Entonces con gente de casa se consiguió un ascenso que nadie esperaba y veinte años más tarde, también con gente de la casa, con jugadores veteranos que volvieron a apostar por el fútbol y con otros que quieren consolidarse en superiores categorías, se puede lograr una gesta con la que nadie soñaba cuando el equipo comenzaba la temporada, allá por septiembre, con tres derrotas consecutivas y el adiós del técnico Carlos Fontana.
Comparaciones que solo se podrán hacer realidad si el Xerez, como se espera, asciende el domingo.
