Una representación de la vida y la pasión de Jesucristo en la que participan 600 vecinos del municipio cada Viernes y Sábado Santo
El pueblo malagueño de Riogordo se prepara para celebrar "con ilusión y orgullo" sus 72 años de tradición de El Paso, una representación de la vida y la pasión de Jesucristo en la que participan 600 vecinos del municipio cada Viernes y Sábado Santo.
"Nos sentimos muy orgullosos de este referente religioso y cultural que también es ya una fiesta de interés turístico singular y tiene repercusión económica" para la comarca y los alrededores, afirma el alcalde de la localidad, Antonio Alés, en una entrevista con EFE.
Cerca de 4.000 espectadores acuden a ver cada año El Paso de Riogordo, de casi tres horas de duración, en un recinto natural acondicionado para llevar al público 2.000 años atrás con la participación de "gente de todo tipo, más o menos creyente", que a lo largo de su vida interpreta diferentes papeles.
Entre las diecisiete escenas representadas destaca el 'Sermón de la Montaña y elección de los apóstoles', 'La Curación de un ciego' y otras dedicadas a los últimos tramos de la vida de Jesús, como 'Jesús se despide de su madre', 'La última cena' o 'Jesús muere en la Cruz'.
Asegura el alcalde que "no hay edad" para ser uno de los personajes de esta representación y considera que los vecinos, pese a sus escasos o nulos conocimientos de interpretación, "lo hacen bastante bien".
El propio edil hace este año de Abraham junto a su hijo Ángel en la escena de 'El sacrificio de Isaac'.
"Estamos deseando que llegue Semana Santa porque lo vivimos con mucha intensidad, hay una cantera extraordinaria", señala el alcalde, que ve en este tipo de celebraciones una oportunidad para que la gente conozca los pueblos, sobre todo en estos tiempos marcados por los procesos de despoblación.
El presidente de la Junta Organizadora de la Agrupación El Paso, Emilio Sánchez, recuerda que en su representación no solo participan los 600 vecinos que hacen de actores y figurantes, sino casi todo el pueblo, que tiene unos 2.900 habitantes, implicados en tareas de organización, maquillaje, vestuario, publicidad, dirección de escena o responsables de sonido. Todos ellos, recalca, hacen posible El Paso.
Sánchez reconoce la dificultad del comité organizador para lograr la paridad en una historia "predominada por hombres" que tratan de abordar con inclusividad, dotando de "un mayor protagonismo a las mujeres" a partir de escenas como la del 'Arrepentimiento de María Magdalena' o la del 'Encuentro de Jesús con la samaritana'.
Además, recalca que en esta ocasión las féminas son mayoría entre los figurantes, con 400 mujeres y 80 hombres.
El Paso se representa "en riguroso directo y al aire libre" en el recinto natural de El Calvario, una amplia explanada de 8.000 metros cuadrados al aire libre.
"Es el orgullo del riogordeño", remarca un emocionado Sánchez, que recuerda que de adolescente encarnó a Issac, más tarde a Juan y desde hace 35 años a Pedro.
"Este tipo de espectáculos no existe con estas características en otros sitios", afirma el alcalde, que está convencido de que gracias a la implicación de los vecinos "va a durar muchísimos años más, otros 72 por lo menos".
El Paso de Riogordo nació en 1951 a partir de un libreto de diálogos, elaborado desde el Evangelio y cánticos de la Iglesia, que escribió Don Tiburcio Martín Toledo, maestro de la época y cofundador de esta actividad junto a Ricardo Sánchez Mezcua.
Es una Fiesta de Singularidad Turística Provincial que también está declarada como Fiesta de Interés Turístico de Andalucía y Fiesta de Interés Turístico Nacional.