El portero argentino Willy Caballero fue el protagonista del partido de La Rosaleda entre el Málaga y el Valladolid al evitar con una espectacular intervención a remate de Javi Guerra, en los instantes finales, que un especulativo equipo visitante deshiciera el empate a uno con el que acabó el partido.
El equipo malagueño comenzó fuerte, mandando y con acercamientos al área del conjunto vallisoletano, como un lanzamiento del centrocampista ucraniano Iakovenko y un cabezazo del delantero paraguayo Roque Santa Cruz.
El Valladolid intentó defenderse, pero sin encerrarse en su campo, ya que su técnico, Juan Ignacio Martínez, situó a dos puntas desde el inicio, Javi Guerra y Manucho.
El Málaga tuvo varios avisos claros para marcar y, tras un saque de esquina del portugués Sergio Barbosa 'Duda', peinó el balón el paraguayo Roque Santa Cruz a la derecha del meta Mariño, consiguiendo adelantar a los locales en el minuto trece.
El Valladolid flojo, solo se acercó a las proximidades de la portería defendida por Caballero con un remate de cabeza de su goleador Javi Guerra, sin consecuencias. El delantero malagueño del Valladolid era el único que intentaba crear peligro con otro cabezazo que salió fuera.
El gol no le sentó excesivamente bien al Málaga, que reculó y se metió en su área, dando opciones al rival, que empezó a insistir con centros por las bandas, aunque sin mucha efectividad.
La desidia del Málaga, que permaneció agazapado, propició que un centro por la derecha de Rukavina, que no logró despejar la defensa malaguista, lo convirtiese el sueco Daniel Larsson en el tanto de la igualada, con un remate cruzado.
En el tiempo restante hasta el descanso, poco juego por parte de ambos equipos y silbidos por el poco fútbol de los locales, tras cumplirse los primeros veinte minutos.
El Málaga inició la segunda parte como empezó la primera, insistiendo, con acercamientos peligrosos, pero sin tino. Dominó ante un Valladolid que ni se inmutaba y tampoco hizo nada por buscar la sorpresa.
El partido deambulaba sin sentido, con muchos nervios en el Málaga, impreciso, presionado y con pocos recursos más que a balón parado. Santa Cruz tuvo la ocasión más clara con otro remate de cabeza que salió pegado al poste izquierdo.
El propio Santa Cruz, única referencia ofensiva, volvió a cabecear un centro de Antunes, pero de nuevo se fue fuera. Era el minuto 73 y el Valladolid ni se asomaba por el área malaguista.
Fue seis minutos después cuando un centro por la derecha no lo despejó en el punto de penalti Pablo Pérez y Óscar disparó al larguero.
El Málaga, con muchas carencias, fue incapaz de enlazar una jugada y el Valladolid, con idénticas penas que su oponente, tuvo otra ocasión en el tiempo de prolongación con un lanzamiento del delantero Javi Guerra que paró Caballero y que hubiera supuesto el triunfo vallisoletano.
