El Unicaja recuperó la cuarta posición de la clasificación en la Liga Endesa al ganar de forma inapelable al Laboral Kutxa (83-64), en un buen partido de los malagueños ante un conjunto vitoriano flojo y que no tuvo su día, por lo que fue superado en los cuarenta minutos.
Al equipo malagueño le costó entrar en el partido, centrarse y saber que se estaba jugando la cuarta plaza. El conjunto vitoriano, liderado por el escolta francés Fabien Causeur (once puntos) mandó en el marcador 7-10 a los cuatro minutos.
El Unicaja despertó, apretó en defensa e intentó sumergirse en la zona rival para superar el juego interior, lo que se tradujo en un parcial de 8-0 rematado con un triple del alero esloveno Zoran Dragic que elevó al equipo local (17-12, minuto 8).
El Unicaja había cambiado por completo y superó en todas las facetas al rival, que en cinco minutos sólo consiguió meter dos puntos en su casillero.
Los de Joan Plaza continuaron con su superioridad en ambas zonas, en el rebote y su defensa fue más agresiva que la del Laboral Kutxa, cuyo entrenador, el excajista Sergio Scariolo, no encontró el quinteto para plantar oposición (37-23, minuto 17), aunque logró rebajar algo la ventaja al descanso 39-31.
El encuentro lo tenía controlado el Unicaja, que se desmelenó en el tercer periodo ante un rival desdibujado y que pareció entregado al equipo andaluz.
Un 61-42, tras un parcial de 10-0 en el minuto 30, sentenció prácticamente el enfrentamiento, a lo que ayudó una serie de triples de Earl Calloway y de Mindaugas Kuzminskas.
No lo dejó escapar el Unicaja, que en un buen último periodo, con Kuzminskas como estilete ofensivo (dos triples consecutivos y una aportación de 14 puntos), remató el triunfo.
