Agentes de la Policía Nacional han detenido en el municipio malagueño de Marbella a un hombre por su presunta responsabilidad en cinco delitos de hurto, uno de robo con fuerza y un delito leve de estafa.
Según las indagaciones, el sospechoso habría quedado con las víctimas, algunas conocidas, y aprovechando cualquier despiste o tras realizar alguna maniobra de distracción consumaba el delito. En el caso del robo con fuerza violentó la ventana de un domicilio para acceder a su interior y sustraer un terminal telefónico.
Esta operación, que ha sido llevada a cabo por investigadores adscritos a la Comisaría Local de Marbella, se inició al tenerse conocimiento de varias denuncias de hurtos en los que el 'modus operandi' de todos ellos resultó ser muy similar.
Según las pesquisas, el arrestado, con numerosos antecedentes por delitos de la misma naturaleza, se dedicaba a sustraer teléfonos para posteriormente venderlos en el mercado negro. En la mayoría de ocasiones mediante hurtos cometidos al descuido, pero sin descartar hacer uso de la fuerza para entrar en una vivienda y robar un terminal telefónico, ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.
A dos de sus víctimas las convenció para ir al domicilio de un amigo y, tras ganarse su confianza, les sustrajo sendos teléfonos. En otro de los casos, durante un trayecto en autobús se aproximó a un viajero con movilidad reducida, al cual conocía de vista, y con la excusa de prestarle ayuda le realizó una maniobra de distracción y le robó un teléfono y un cordón de oro.
Según la investigación, todo apunta a que el investigado sustraía este tipo de efectos porque les daba salida fácil y obtenía dinero rápido. Tanto es así que otros dos hurtos los perpetró en dos establecimientos de la localidad marbellí, aprovechando la distracción de los presentes se apoderó de dos terminales, uno en cada comercio.
Una de las víctimas se percató, posteriormente, de lo que ha hecho y lo localiza, exigiéndole la devolución del teléfono sustraído pero el autor le comunicó que ya lo había vendido en una casa de empeños.
El robo con fuerza esclarecido en esta investigación se produjo en una vivienda a la que el autor accedió forzando una ventana. A pesar de que en el interior del domicilio había una persona no desistió en su acción, entró y sustrajo un teléfono móvil. Del dispositivo establecido al efecto, los agentes identificaron y detuvieron al presunto responsable que ya fue puesto a disposición judicial.