El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha puesto en libertad a diez prisioneros de guerra extranjeros tras los esfuerzos de mediación del príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammad bin Salman Al Saud.
Los prisioneros liberados proceden de cinco países diferentes y han sido trasladados de Rusia a Riad, capital del reino, para un posterior retorno seguro a sus países de origen. Se trata de prisioneros de Marruecos, Estados Unidos, Reino Unido, Suecia y Croacia.
Tal y como informan autoridades saudíes en un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Arabia Saudí expresa la gratitud y agradecimiento del Gobierno del reino a Rusia y Ucrania por su respuesta a los esfuerzos realizados por el príncipe heredero para la liberación de los prisioneros de guerra.
Por su parte, líderes mundiales de los países que se han visto afectados también han tenido unas palabras de agradecimiento para el presidente de Ucrania, Vladimir Zelenski, y la implicación de Arabia Saudí para facilitar un desenlace favorable.
La primera ministra británica, Liz Truss, se ha pronunciado públicamente para “agradecer a Vladimir Zelenski sus esfuerzos por conseguir la liberación de los detenidos y a Arabia Saudí por su ayuda”, resaltando que “Rusia debe poner fin a la despiadada explotación de los prisioneros de guerra y los detenidos civiles por fines políticos”.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha celebrado que “Ucrania incluya en las negociaciones a todos los prisioneros de guerra, independientemente de su nacionalidad” y ha dado las gracias al reino saudí “por ayudar a encabezar esta iniciativa humanitaria”.